La Semana Santa de Ronda de este año ha dejado momentos memorables desde el primer hasta el último día y es que este Domingo de Resurrección se espera con especial interés para poder ver en la calle la nueva imagen del Cristo Resucitado, obra de Israel Cornejo que ha estado acompañado en su paso de costaleros por una imagen de María Magdalena. Por su lado la imagen mariana de la Virgen de Loreto ha vuelto de llenar de alegría su desfile procesional siendo uno de los escasos pasos de costaleras que existen en la Semana Santa andaluza. Firmando un recorrido extraordinario las dos últimas imágenes de la Semana Mayor rondeño contaron en la presidencia con la participación del delegado municipal de Participación Ciudadana, José Mª Jiménez.
Con la procesión de hoy se cierra una Semana Santa que, a falta de balance oficiales que llegarán en los próximos días, no se duda en calificar de histórica, no solo por la brillantez con la que se han desarrollado las Estaciones de Penitencia, sino por la enorme cantidad de personas que han llegado en estos días a la ciudad confirmando estos días como de los más importantes para Ronda durante el año.
La alcaldesa, Teresa Valdenebro, ha querido felicitar todos los que han hecho posible vivir unos días, “que sin duda han sido extraordinarios para la ciudad porque de nuevo hemos podido experimentar las múltiples maneras que existen de vivir la Semana Santa y hacerlo recibiendo en Ronda a miles de personas que han podido disfrutar de todo lo que la ciudad oferta, y hacerlo en unas jornadas realmente excepcionales”. Destacó la labor de la agrupación de Hermandades y Cofradías, de todas las hermandades y de los miles de hombres y mujeres que las componen y “han posibilitado una Semana Santa sencillamente perfecta”. No ha querido olvidar el trabajo de los cuerpos de seguridad, las brigadas municipales o Soliarsa, “sin cuya implicación sería imposible que todo hubiera salido tan brillante”. Por último, ha querido resaltar el impecable comportamiento de todos los rondeños y rondeñas que “han sabido una vez más dar una lección de respeto y cariño a las hermandades, con un comportamiento ejemplar al paso de los cortejos y siendo perfectos anfitriones de todas las personas que nos han visitado en estos días”.
