El embajador de Brasil en España, Paulo César de Oliveira Campos, reconoció este lunes que "hay un gran expectativa" sobre el delantero brasileño del FC Barcelona, Neymar Jr, pero restó exceso de responsabilidad al azulgrana porque "es el equipo el que tiene que ganar", al tiempo que avisó a España por el "peligro" de ser considerada favorito como la 'canarinha'.
"Hay una gran expectativa sobre Neymar, será la gran estrella en el Mundial. El equipo de Brasil no tiene muchos jóvenes, pero es el equipo el que tiene que ganar, no sólo Neymar. Es la estrella en un equipo con jugadores muy importantes", destacó Oliveira Campos en los Desayunos Deportivos de Europa Press, patrocinados por 'Repsol', 'LAE' y 'Liberbank'.
El diplomático, que mostró su confianza porque la cita será un éxito a todos los niveles, recordó que "en cada Mundial con Brasil destaca un jugador" y que el azulgrana "es muy joven". "Pelé debutó a los 17 años y tuvo que asumir una responsabilidad que su juventud le permitió hacer cosas que uno más maduro no puede hacerlo. La juventud no es mala si la usas en el campo", añadió.
Por otro lado, se refirió a la elección de Diego Costa de jugar con España. "Él decide qué es lo mejor y ha mirado esta posibilidad viendo que no tenía oportunidades con Brasil pero sí con España, es legítimo", apuntó. "Que le vaya bien, para nosotros, si gana con España ya tenemos un brasileño ahí y un trocito de estrella será nuestro. Y si gana Portugal, tenemos a Pepe", bromeó.
Sobre la actual campeona del mundo, el embajador brasileño no olvida que "es un gran equipo" y que "viene con un recorrido importante". "No es un adversario fácil, pero tiene que tener cuidado porque ser favorito, como Brasil, es malo", recalcó.
"También están Argentina, Alemania o Portugal con Cristiano que pueden ganar. Los equipos tienen que llegar maduros al final, no al inicio, porque uno que llega bien puede llegar mal al final. Me gustaría ver una final Brasil-España", confesó Paulo César de Oliveira.
El dirigente fue irónico con una posible repetición del 'Maracanazo' de 1950 ante Brasil. "En Brasil nos gusta tanto el fútbol que el tema del 'Maracanazo' tiene una placa en Maracaná", indicó. "Pero no nos gustaría respetar esta vez a nadie. Es difícil porque parece más fácil porque estás jugando en casa, pero mira lo que le ha pasado al Atlético. La tensión puede llevar a algo negativo, pero creo que esta vez no va a haber y que lo vamos a celebrar con mucha alegría", afirmó.
"LA GENTE NO ESTÁ EN CONTRA DEL FÚTBOL"
El diplomático, que insistió que está haciendo un "esfuerzo continuo para mostrar que Brasil no es solo fútbol, samba y café" y que únicamente "existe un rey, el rey Pelé", se refirió al tema de las manifestaciones, después de lo sucedido en la Copa Confederaciones, y del posible rechazo existente en la población a la celebración del Mundial.
"Puede ser que el 48 por ciento esté en contra, pero no contra el fútbol, puede ser que sea contra la forma como se han hecho las cosas. Cuando empiece el fútbol cambiarán las cosas porque hay muchos interés. En la Copa Confederaciones se hicieron manifestaciones de forma democrática, a nadie se le impidió ir al estadio y ni a los manifestantes ir a las manifestaciones", admitió el embajador.
En este sentido, pidió "que se respeten los derechos de todos los ciudadanos". "Los que quieran manifestarse de forma pacífica pueden hacerlo. Lo que no se va a consentir es que unos pocos acudan a la violencia", advirtió.
Otro tema preocupante es el de los estadios, aunque Oliveira dejó claro que según "la información" de la que dispone el "único que no está listo es el de Curitiba", donde jugará España. "Pero lo va a estar, estamos a un mes", puntualizó.
El embajador brasileño lamentó los accidentes laborales en la construcción de los recintos. "Hay cosas que pasan que uno no quiere que pasen por imprudencia personal o de la empresa. Estamos involucrados en los 12 estadios, es mucho trabajo y un pequeño descuido de la empresa o el trabajador puede provocar que pase. La gente tiene ganas de hacerlo bien y rápido. Hay una fecha límite y la gente se apura y presiona, no es una buena señal, pero la vida sigue", confesó.
Además, resaltó que en las doce sedes "se han construido estadios en ocho y en las demás se han modernizado". "Algunos van a pasar a la historia como ejemplos de sostenibilidad", subrayó, citando el estadio Mineirao de Belo Horizonte y resaltando que "casi el 70 por ciento de las entradas ha sido vendidas para los brasileños".
"EL MUNDIAL SERÁ UN BUEN NEGOCIO PARA BRASIL"
A nivel económico, Oliveira aseveró que los "beneficios tendrán un efecto multiplicador en la economía brasileña" y que el Mundial "será un buen negocio para Brasil". "Los números no engañan. Se espera que el evento sume al PIB 10.000 millones de euros y 61.000 millones hasta 2019, En valores acumulados, los beneficios equivalen al 0,4 por ciento del producto interior al año", detalló.
Por ello, ve la cita como "una importante oportunidad para aunar esfuerzos lo público y lo privado para carreteras, reformar aeropuertos y las redes de transporte en grandes ciudades". "Y aunque no es suficiente para solucionar los problemas de infraestructuras, dejará un importante legado. Cada sede representa un punto regional fundamental que desarrollará la economía, no podíamos reducirlo en una región", prosiguió el embajador.
"No voy a negar el valor del fútbol para Brasil. Existe una manera muy brasileña de jugar y de vivir el fútbol. El fútbol es motivo de orgullo nacional y somos los principales exportadores de talento futbolísticos. No se van a sentir decepcionados", ahondó, confirmando que se ha emitido "un decreto" en el país que "señala que los días que la selección juegue la jornada en los organismos públicos terminará a las 12.30 horas" y que el partido inaugural entre Brasil y Croacia y otros en los participen "países iberoamericanos" se podrán ver en la Casa do Brasil de Madrid.