Brown hizo su anuncio durante la cumbre de los países de la Commonwealth que se celebra en Trinidad y Tobago, en presencia del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien asistirá también a la conferencia londinense.
En la reunión participarán, además del propio presidente afgano, Hamid Karzai, representantes de los 43 países que integran la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en el país asiático, así como los vecinos de Afganistán además de instituciones internacionales, pero no los talibanes, según precisó Brown.
“No es posible (que asistan los talibanes). Hay que tener absolutamente claro que nuestra intención es reforzar las instituciones afganas, las instituciones locales y debilitar a los talibanes”, explicó en conferencia de prensa el primer ministro.
“Necesitamos un impulso político acorde con el impulso militar que hemos acordado, dijo también Brown, quien agregó: “Eso significa que el presidente Karzai tiene que aceptar que habrá una serie de objetivos por los que será juzgado, así como unos baremos que establecerá la comunidad internacional”.
Según el político británico, Karzai tendrá que aportar 50.000 militares para su entrenamiento a lo largo del próximo año; deberá mejorar la capacidad de sus fuerzas policiales e instalar a gobernadores de distrito y regional libres de corrupción y que sirvan al pueblo afgano.
Brown expresó asimismo su esperanza de que de aquí a la fecha de celebración de la conferencia londinense, los países de la OTAN puedan aportar otros 5.000 militares.
