El alcalde de Torremolinos, Pedro Fernández Montes, ha destacado hoy el “mérito” del pueblo de Torremolinos cuando, “aglutinado y dirigido por la Junta Pro-Autonomía” que él mismo presidía, logró recuperar la autonomía municipal; ha anunciado que la actitud mantenida por el entonces alcalde de Málaga, Pedro Aparicio, respecto al expediente para la segregación, fue “un acto a caballo entre el latrocinio, lo despótico y lo prevaricador” y ha calificado de “odioso” comparar a Torremolinos con el separatismo catalán.
El primer edil hizo tales afirmaciones esta tarde en la Plaza de la Independencia, durante el tradicional discurso del primer edil en el acto institucional de conmemoración de la consecución de la autonomía municipal, el 27 de septiembre de 1988.
Después de la interpretación de varias piezas musicales a cargo de la Banda Municipal de Música, Pedro Fernández Montes inició su intervención queriendo resaltar la importancia de la jornada. “Estamos –dijo- ante la fecha más importante de la historia de Torremolinos de todos los tiempos”, y se interrogó a continuación sobre si “hay tal vez algo más importante y trascendente para un pueblo que tener la capacidad de decidir su propio destino”.
El primer edil se refirió entonces a la “singularidad” del proceso que permitió la autonomía municipal de Torremolinos y, en el relato detallado de algunos momentos de dicho proceso, se refirió al entonces alcalde malagueño en aquel momento, Pedro Aparicio, de quien afirmó que “después de callar durante 24 años; ha rezumado públicamente su rencor por la herida de la indepen-dencia de Torremolinos, del que yo creo fue su gran error político”.
En este punto, el alcalde afirmó que “los idus de marzo de Cásar son los fantasmas de septiembre de Aparicio” y, tras hacer hincapié en que “los pormenores de nuestro proceso de independencia municipal son ya, simplemente, la parte más importante del acervo histórico de Torremolinos y sus gentes” y añadió que “Pedro Aparicio mintió y engañó a los vecinos de Torremolinos porque se presentó a la eleccionesmunicipales de 1979 con un programa electoral en el que prometía la autonomía municipal para Torremolinos y después fue su más acérrimo enemigo”.
Torremolinos y Cataluña
En su pormenorizado relato de hechos que marcaron el proceso reivindicativo del pueblo de Torremolinos frente a la permanente resistencia de Málaga a la concesión de la autonomía municipal, Pedro Fernández Montes explicó igualmente que “Torremolinos nunca argumentó agravio histórico alguno, sino un derecho histórico que es muy diferente; un derecho que nos arrebata-ron en 1924”, y afirmó rotundo que “comparar a Torremolinos con el separatismo catalán es odioso”.
Abundando en este sentido, el alcalde dijo también que “Torremo-linos pueblo independiente de Málaga, con ser más torremoli-nense, será también mucho más malagueño”, y aclaró: “Nunca nos sentimos separatistas. Estuvimos contra la clase dirigente de Málaga que nos negaba nuestro derecho, pero nunca estu-vimos contra los malagueños”.
Para el entonces presidente de la Junta Pro-Autonomía y hoy primer edil de Torremolinos, “la principal provocación la cometió Pedro Aparicio en un acto a caballo entre el latrocinio, lo despótico y lo prevaricador, al secuestrar el expediente en contra de la Ley”, anunciando a continuación que “la famosa sentencia que obliga a Torremolinos a pagar una enorme cantidad de dinero va a ser inminentemente recurrida en Revi-sión, una vez que después de 24 años, por fin hemos dejado de estar indefensos porque hemos podido tener acceso al expediente de la deuda que reclamó el Ayuntamiento de Málaga en diciembre de 1992 por orden de su Alcalde Pedro Aparicio, entiendo que por despecho y como su particular venganza”
Pedro Fernández Montes dijo también en este sentido que “curiosamente, o no es tan curioso, la inmensa mayoría de documentos de aquellas cuentas no los firmaba nadie, y los pocos firmados además de intrascendentes no habían sido suscritos por ningún habilitado nacional”, y recordó en este contexto que “Pedro Aparicio, en el Ayuntamiento de Málaga, se negó a nuestra petición de tener acceso y poder cotejar los ingresos de Torremolinos; no todos sino los tres más impor-tantes, como eran Contribución Urbana (hoy IBI), Urbanismo y Fondo de Cooperación Nacional”.
Tras significar que “ante tanto abandono, tanta discriminación administrativa y tantos obstáculos, el pueblo de Torremolinos cerró filas con la Junta Pro-Autonomía de Torremolinos, cada vez con más fuerza, para conseguir volver a ser municipio independiente”, el hoy alcalde quiso referirse al refranero español para señalar que “el tiempo da y quita razones. Hoy en día –recalcó- todo el mundo puede ver quién tenía y quién no tenía la razón. Los hechos y el aspecto que presenta la ciudad de Torremolinos hablan por sí solos y han barrido los argumentos de Pedro Aparicio y sus acólitos y los han arrojado a la historia negra de Torremolinos”.
Por último, Pedro Fernández Montes afirmó que, por todo lo dicho con anterioridad, “tuvo mucho mérito lo que el pueblo de Torremolinos consiguió, aglutinado y dirigido por la Junta Pro-Autonomía de Torremolinos, cuyos miembros supervivientes volvemos a reunirnos después de 33 años de iniciar tan importante, trascendental y hermosa aventura de nueve años, en la que yo hoy como Alcalde quisiera terminar hablando como Presidente de aquel grupo de hombres y mujeres, muchos de ellos entonces muy jóvenes, a quienes agradezco su presencia aquí esta tarde, para dar testimonio de todas aquellas vicisitudes, y unirnos en el recuerdo de aquellos otros compañeros que por imperativos de la vida ya se fueron”.
La actuación del Ballet de Esperanza Márquez sirvió de colofón al acto,cuyo cierre tuvo lugar tras la solemne interpretación de los Himnos de Andalucía y España, que puso brillante broche a esta emblemática jornada.
