Juan Espadas está dispuesto a hablar de todo pero sin forzar nada. Si su primer mandato como alcalde lo cerró sin necesidad de un pacto de gobierno (tenía once concejales), los resultados del pasado 26 de Mayo (13 concejales) le dan aún más margen de maniobra. Ya lo ha repetido en varias ocasiones y ayer, en el comienzo de su ronda de contactos con los partidos con representación en el Ayuntamiento, lo volvió a hacer: su objetivo es gobernar en solitario aunque sin descartar acuerdos, siempre y cuando no “desnaturalicen” el proyecto con el que los ciudadanos le han concedido ser la lista más votada con una diferencia de cinco concejales con respecto al segundo puesto (PP, con ocho ediles).
Espadas enmarcó la ronda de contactos de ayer en “una primera toma de contacto protocolaria e institucional” en la que no se produjeron “concreciones”. De hecho, Espadas puede llegar al 15 de junio (día en el que se procederá a la constitución de los ayuntamiento) sin cerrar ningún acuerdo de investidura.
La ley orgánica de Régimen electoral, en su artículo 196, párrafo c, establece que si ningún candidato a alcalde obtiene la mayoría absoluta en primera votación, pasa automáticamente a ser proclamado alcalde el que encabece la lista más votada. Espadas, por tanto, ni tiene prisa ni tiene necesidad.
Fuentes municipales señalaron ayer que Espadas está dispuesto a negociar “con seriedad y rigor” aquellas propuestas “compatibles” con su proyecto político desde el “diálogo”. De hecho, incidían en que los encuentros no se desarrollaron “sobre la base de intentar forzar un gobierno de coalición donde no haya suficientes puntos de encuentro o donde se desnaturalice el proyecto socialista”.
Tras la ronda de reuniones, la candidata de la confluencia de izquierdas Adelante, Susana Serrano, indicó que presentó a Juan Espadas las “prioridades” de su formación para los barrios desfavorecidos, las políticas de movilidad, la igualdad entre hombres y mujeres y la lucha contra el cambio climático. Así, expuso que su fuerza política ha puesto encima de la mesa las medidas “prioritarias” de su programa electoral, con especial atención a las medidas “urgentes” necesarias en los barrios de Sevilla que encabezan los ranking de pobreza. Serrano desveló que las líneas de trabajo de Espadas para los próximos cuatro años coinciden con el Plan Estratégico Sevilla 2030, que fija seis objetivos generales como la creación de empleo, la lucha contra la pobreza y la desigualdad o el combate contra el cambio climático, entre otros aspectos.
Por parte de Vox, que se estrenará en la nueva Corporación municipal con dos concejales, la número uno de la candidatura, Cristina Peláez, explicó que su reunión con Espadas fue “muy cordial”, indicando que el dirigente socialista le trasladó su “percepción de la realidad” de la ciudad y “los proyectos que piensa hacer” en este nuevo mandato. En el caso de Vox, según Peláez, expuso sus líneas de “pensamiento” y el “deseo de actuar por y para los sevillanos”. “La reunión ha sido muy cordial. Estamos deseando ponernos a trabajar”, enfatizó.
Por parte de Cs y PP no se hicieron valoraciones oficiales al término de sus encuentros con Espadas. No obstante, el candidato de la formación naranga a la Alcaldía de Sevilla, Álvaro Pimentel, aseguraba durante una rueda de prensa anterior a esta reunión que su formación contaría con un papel “constructivo y fiscalizador” durante el próximo mandato. “Estamos muy tranquilos y no estamos obsesionados con sillones”, aseguró. Así, recordó que, si existiera esa posibilidad de pacto, la formación local elevaría al Comité Nacional de Pactos creado por Cs ese “interés”, tras lo que se decidirá qué hacer “caso por caso”.
