El mosaico romano descubierto en 2008 en Aznalcázar (Sevilla) en el marco de las obras promovidas para lo que actualmente constituye el centro cultural El Arquillo de dicha localidad, habilitado sobre el antiguo pósito municipal del siglo XVII, construido a su vez a partir de un lienzo muralla islámica, luce de nuevo todo su esplendor tras su rehabilitación a manos del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH).
El remozado mosaico ha sido presentado este pasado jueves por la tarde en el propio Ayuntamiento de Aznalcázar, donde la alcaldesa, Manuela Cabello, ha explicado que gracias a esta intervención ha sido posible "frenar el deterioro del mosaico, recuperarlo y poner en valor este patrimonio" de la localidad. Por su parte, el director del IAPH, Lorenzo Pérez del Campo, señaló que la importancia de realizar proyectos como éste radica en poder "mantener la esencia de un pueblo y ser conscientes de sus orígenes e identidad".
Tras su intervención, la arqueóloga Esther Núñez Pariente de León explicó a los presentes que aunque no ha sido posible datar con exactitud el mosaico, podría haber sido elaborado en el siglo III de la era actual. Además, recordó que algunos investigadores ubican la antigua ciudad romana Olontigi en las tierras aznalcazareñas y que el mosaico demuestra que hubo un asentamiento romano de cierta importancia en el entorno de la actual Aznalcázar.
La calidad del mármol de las teselas y de la ejecución del mosaico encontrado, así como su gran tamaño, lleva a pensar que éste debía pertenecer a un edificio público de importancia o a una "domus" de una familia adinerada.
Por último, intervino Constanza Rodríguez Segovia, que ha sido una de las restauradoras del mosaico, para explicar cómo ha sido todo el proceso de recuperación, una labor minuciosa y delicada que ha finalizado con éxito.
