El alcalde de Coria del Río (Sevilla), Modesto González (PA), ha hecho un llamamiento a la "tranquilidad" por el episodio de fuertes olores registrado en la barriada Guadalquivir de la localidad sevillana, al tiempo que ha asegurado que "no hay riesgo para la salud" de los vecinos.
En declaraciones a los periodistas, González ha reconocido que es "difícil" que los vecinos afectados se tranquilicen después de llevar "treinta días" sufriendo estas "molestias", si bien ha reiterado que "no hay riesgo" para la población porque los dos elementos detectados en el ambiente y están provocando estos fuertes olores "no son tóxicos". "Lo que están sufriendo los vecinos a día de hoy es una sintomatología que no es normal, pero que no supone un riesgo para su salud", ha incidido.
Del mismo modo, ha anunciado que desde este martes se han activado más medios técnicos por parte de las administraciones involucradas con el objetivo de poner fin cuanto antes a este problema. Así, la Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas de Sevilla SA (Emasesa) se ha comprometido a colocar un extractor industrial en la zona para intentar eliminar parte de los gases que están llegando a las viviendas.
Al mismo tiempo, ha añadido que se va a hacer una nueva infraestructura que permita evitar que los gases que puedan venir a través de la red de la empresa pública de gestión de aguas de los ayuntamientos del Aljarafe, Aljarafesa, pasen por la red de Emasesa y, por tanto, a las calles y viviendas de vecinos.
Asimismo, ha anunciado una ampliación del número de agentes ambientales en la zona afectada, así como la puesta en marcha de la realización de análisis que permitan saber los niveles que se van registrando de los componentes presentes en el ambiente, con el fin de controlarlos y comprobar su evolución.
Además, ha afirmado que se vigilará "un posible vertido" a la red de saneamiento. No obstante, ha querido dejar claro que "a día de hoy no se está produciendo un vertido a la red de saneamiento porque la realidad es que no se ha localizado".
Por último, ha recordado que el año pasado se produjo un episodio similar aunque "no con las mismas características ni continuidad en el tiempo", que se ha vuelto a repetir "en las mismas fechas". Se trata, ha dicho, de "situaciones muy complejas y difíciles de atajar" porque los elementos que aparecen en "los análisis no son habituales". Sin embargo, ha asegurado que van a poner "todos los medios al alcance para encontrar si lo hubiera al responsable de lo que está ocurriendo para que asuma las consecuencias".
HIPÓTESIS DE EMASESA
Por su parte, el consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop, ha hecho hincapié en que "este fenómeno no genera ningún riesgo para el medioambiente ni para la salud de las personas", al tiempo que ha asegurado que van a poner "todos los medios posibles para detectar el origen del problema y darle una solución".
"No vamos a escatimar ni medios ni esfuerzos. Tenemos que buscar en una infraestructura que está enterrada un posible origen de la contaminación que presumimos que puede ser un hidrocarburo en un depósito enterrado en la zona afectada", ha manifestado.
En este sentido, ha añadido que para ello lo primero que han hecho es limpiar la red completamente "en un tiempo récord", para continuar investigando las acometidas de las viviendas y terminar introduciendo cámaras para fotografiar y filmar "todos los centímetros cuadrados" de la red de saneamiento en la zona en cuestión. "No vamos a parar hasta encontrar la fuente y el origen del problema para solucionarlo", ha repetido.
De hecho, ha matizado que se trata de una cuestión de tiempo, por lo que ha pedido "tranquilidad, paciencia y confianza" porque van a intentar llegar hasta el final del problema.
Por el momento, ha explicado que no han detectado en el agua la corroboración de que se haya producido un vertido de hidrocarburo en la red. Así pues, "todos los análisis no dan concentración suficiente como para decir que se trata de un vertido líquido", por lo que están barajando la hipótesis de que pueda deberse a un respiradero de gasóleo u otro combustible conectado a la red de saneamiento y que por succión de la propia red esté introduciendo dentro de los colectores gases procedentes de un depósito.
Por ello, ha concluido diciendo que para investigar los fuertes olores van a proceder a cortar el flujo de aire sectorialmente para ver donde se producen y no dichos olores.