El Grupo Municipal Socialista propondrá al Pleno del Ayuntamiento de Sevilla, que tendrá lugar el viernes, solicitar a la Comunidad de Regantes del Valle Inferior del Guadalquivir y a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) el correcto mantenimiento de su cauce.
De este modo, se insta a estos organismos a retomar de forma urgente las labores continuas de conservación y limpieza en el trazado urbano del mismo a su paso por las calles Secoya y Cojinete, ambas situadas en el Distrito Este-Alcosa-Torreblanca y especialmente afectadas.
Dentro de la solicitud, se incluye además la ejecución de un cerramiento exterior que garantice la seguridad del entorno, así como pedir el uso en superficie del trazado ya cubierto y estudiar su posible uso como zona recreativa y de aparcamiento, lo que generaría un bulevar junto a la calle Secoya.
Además, la propuesta insta a retomar las negociaciones con la Comunidad de Regantes del canal del Valle Inferior del Guadalquivir con el fin de ejecutar a medio plazo la supresión del tramo urbano del mismo, logrando recuperar dicho espacio para el disfrute de los vecinos del Parque Alcosa, según detalla el Grupo Socialista en un comunicado.
Así, recuerda que los problemas que ha suscitado esta situación en los últimos años han sido denunciados de forma insistente por los vecinos de la zona, así como por los empresarios del Parque Empresarial Aeropuerto. Su vecindad ve además "con impotencia la degradación e infrautilización de este espacio que bien podría ser un alivio para las deficiencias de espacios libres y de aparcamiento del barrio".
El Canal del Valle Inferior del Guadalquivir fue ideado en 1902 y ya bien entrado el siglo XX se empieza a observar la problemática que supone debido a la expansión oriental de la ciudad. Dichos terrenos, situados al este del núcleo urbano, abandonan así los usos agrícolas para acoger las expansiones urbanísticas, esto es, Parque Alcosa, Sevilla Este y Polígono Aeropuerto.
Los problemas derivados del encorsetamiento del trazado de este canal son varios, aunque, según señala el Grupo Municipal Socialista, hay que destacar la barrera física existente entre ambas márgenes, los costes de conservación y limpieza del trazado urbano y las interferencias con la infraestructura urbana existente.
En los últimos 20 años no ha habido iniciativas para paliar la situación, si bien Emasesa inició hace una década una serie de medidas paliativas como la construcción de una losa para cubrir el primer tramo del canal, aunque cualquier tipo de intervención ha cesado. "A todo ello se suma la nula conservación y limpieza del canal en su tramo urbano", aclara.
