La Policía Nacional ha detenido a un ciudadano marroquí de 47 años sobre el que pesaba una Orden Internacional de Detención por parte de la Interpol, motivada por una estafa cometida en Marruecos que ascendía a medio millón de euros.
En un comunicado de la Policía se ha informado que el detenido ha intentado burlar la acción de la justicia facilitando falsos datos sobre su paradero pero finalmente ha sido localizado y detenido en Sevilla, donde regentaba un negocio.
La investigación ha dado comienzo cuando los agentes han tenido constancia de que un ciudadano de origen marroquí estaba reclamado por las autoridades del país norteafricano a través de una Orden Internacional de Detención emitida por la Interpol, pudiendo estar en Sevilla según los datos acercados por la organización.
El motivo de la reclamación era por la supuesta participación de esta persona en una estafa cometida en Marruecos consistente en un fraude bancario con el que consiguió detraer más de medio millón de euros para huir posteriormente.
Los agentes dieron inicio a un dispositivo policial para la localización y detención de este hombre al que le constaban varios domicilios en distintas zonas de la ciudad de Sevilla que resultaron ser falsos emplazamientos utilizados por el reclamado para evitar que le detuvieran.
Tras descartar los falsos datos, se ha puesto en marcha la utilización de otras técnicas policiales para localizar el lugar exacto donde se encontraba y donde realizaba su actividad.
Finalmente, los investigadores han conseguido localizar a este estafador en el centro de Sevilla donde residía y regentaba un local comercial donde fue arrestado para posteriormente iniciar los trámites que dieron lugar a su extradición a Marruecos como país reclamante.