Guardias civiles pertenecientes a la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Sevilla, junto a agentes del puesto de La Algaba, han detenido a un joven de 32 años, identificado como J.L.M.G., por intentar explosionar una bombona de gas butano en su casa con sus padres y hermanos dentro.
Según ha informado en una nota el Instituto Armado, fue la central COC la que pidió de forma urgente que efectivos de la Guardia Civil se presentaran en un domicilio de La Algaba en el que, según un aviso, se estaba produciendo una situación de riesgo.
Al parecer, uno de los hijos de la familia que habita la vivienda se había pertrechado en la segunda planta con una bombona de butano y un perro de raza boxer y, dando voces y muy alterado, amenazaba con provocar una explosión, advirtiendo de que si alguien se acercaba haría que su perro le atacase.
Una vez en la vivienda, la Guardia Civil valoró la situación, habló con los padres y pidió al ahora detenido que depusiera su actitud por el bien de todos y desistiera de sus amenazas, aunque el joven hizo caso omiso a las peticiones.
Los agentes subieron entonces a la segunda planta y comprobaron que esta persona se encontraba en una habitación a la que había echado el pestillo, mientras que también se escuchaban los ladridos de un perro.
Tras varios intentos más por parte de la Guardia Civil para que abriera la puerta y renunciara a sus intenciones, se escuchó el ruido del cierre violento de la persiana del balcón y, seguidamente, un fuerte olor a gas.
Ante esta situación de peligro, se procedió con la mayor celeridad posible a desalojar la vivienda, tanto de sus moradores, los padres y hermanos del detenido, como de los agentes de la Policía Local que habían acudido a colaborar.
La Guardia Civil realizó una entrada e intervención operativa de forma simultánea por la puerta y la ventana de la habitación donde se encontraba el joven y consiguió reducirlo, abriendo las puertas y ventanas de la vivienda tras la retirada de la bombona.
Finalmente, los agentes detuvieron a J.L.M.G., de 32 años, quien, tras mantener una fuerte discusión en casa de su pareja, donde convive junto con una hija de corta edad y de las que tiene en la actualidad una orden de alejamiento, acudió a casa de sus padres, en la que tuvieron lugar los hechos.