Los colectivos artísticos y culturales reunidos en torno al espacio artístico La Carpa, ubicado en la avenida de las Asociaciones de Vecinos, junto al Polígono Store, en una parcela de titularidad municipal, esperan celebrar la próxima semana una reunión con la concejal delegada de Cultura, Juventud y Deportes, María del Mar Sánchez Estrella, al objeto de analizar el futuro del proyecto. Después de que haya expirado el convenio gracias al cual utilizan estos suelos y con la programación del espacio paralizada, los colectivos esperan que la situación sea reconducida.
Este proyecto cultural, como ha explicado a Europa Press Jorge Barroso, uno de los fundadores de la iniciativa, ha funcionado en una parcela de 2.164 metros cuadrados propiedad del Ayuntamiento hispalense y ubicada en la avenida de las Asociaciones de Vecinos. El pasado 30 de abril, en ese sentido, expiró el convenio firmado en 2011 y gracias al cual los colectivos agrupados en torno a este proyecto disfrutaban de esta parcela, toda vez que el pasado 4 de mayo el espacio cerró su programación con una función de 'Esperando a Godot' bajo la dirección de Joan Font.
Según Jorge Barroso, los colectivos llevan varios meses solicitando una prórroga del convenio gracias al cual utilizaban la citada finca, sin recoger frutos de tales gestiones. En ese sentido, ha reconocido la incidencia que pesa sobre este espacio al carecer de licencia de apertura, extremo que ha atribuido a los "problemas burocráticos" del Ayuntamiento. "Tenemos nuestras tasas pagadas desde 2011. Urbanismo nos pidió un proyecto acústico, luego más documentos y se los dimos y otra vez más documentos. Tuvimos una reunión con ellos y volvimos a presentar el proyecto acústico. Hemos hecho todo lo que nos han pedido", se queja Barros en cuanto a la "tardanza" del Ayuntamiento a la hora de conceder la licencia de apertura, extremo que llevó a los colectivos a dotar de actividad al espacio por "desobediencia ciudadana".
En cuanto a las quejas vecinales aludidas por el Consistorio, Jorge Barroso explica que contra La Carpa pesan "tres denuncias, de pocos vecinos", a cuenta del asunto de la licencia, mediando "dos informes policiales" que, según expone, reflejan la ausencia de superaciones de los límites de inmisión de ruidos a cuenta de avisos vecinales a cuenta de molestias por la actividad del recinto. Por contra, esgrime la "repercusión" de las actividades y espectáculos de La Carpa en el plano cultural y artístico.
Jorge Barroso explica que al no mediar supuestamente gesto alguno por parte de la Administración local que hiciese confiar en la renovación del convenio, los colectivos ya pensaban en "comenzar a desmontar" las instalaciones, si bien el martes recibieron la llamada "de un representante" del Ayuntamiento que les anunció "una reunión con la delegada" una vez finalizase la Feria de Abril el próximo domingo. "Habíamos dado por hecho que esto había acabado. Ahora estamos a la espera de esa reunión", ha dicho Barroso señalando que considera posible que el conflicto sea reconducido.