La Audiencia Provincial de Sevilla ha condenado a cuatro años de cárcel a un hombre de 55 años acusado de intentar golpear con un hacha a los agentes de la Guardia Civil que procedían a detenerlo por un apuñalamiento cometido minutos antes en la localidad de Alcalá del Río.
En la sentencia, consultada por Europa Press, la Sección Tercera considera probado que los hechos tuvieron lugar sobre las 17,30 horas del día 14 de abril de 2011, cuando el imputado, Manuel M.V., comenzó a discutir con la víctima y, en un momento dado, sacó un cuchillo con el que golpeó "repetidas" veces a T.L.A..
De este modo, "y con la intención de acabar con su vida", el procesado le golpeó en el cuello, brazos, pecho, espalda y abdomen, tras lo que el herido pudo evitar que continuara con la agresión al cogerle "fuertemente" las manos y romperse como consecuencia de esto el cuchillo.
Minutos después, y cuando agentes de la Benemérita iban a proceder a la detención del procesado, éste se acercó al marco de la puerta de su domicilio y cogió un hacha con la que trató de golpear a los agentes, quienes, "tras breves forcejeos", consiguieron su reducción y detención.
Atenueante de embriaguez
La Audiencia Provincial considera que, en el momento de los hechos, el imputado había ingerido alcohol, lo que mermaba "levemente" sus facultades cognitivas y volitivas.
Durante el juicio, el procesado reconoció los hechos de manera "expresa y explícita" y mostró su conformidad con los hechos descritos por el fiscal, por lo que lo condena a tres años de cárcel por un delito intentado de homicidio y a un año de prisión por un delito de atentado a agentes de la autoridad, concurriendo la atenuante analógica de embriaguez.
Además, deberá indemnizar a la víctima con 7.000 euros.
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