Actualmente se calcula que más de 2.500 millones de personas son aficionadas a los videojuegos, un dato que va en aumento y que confirma la estrecha relación entre el juego y la vida. Partiendo de esta base, Caixa Forum Sevilla explica a través de la exposición Homo Ludens, que al hablar de videojuegos no solo nos referimos a una industria muy potente a nivel mundial, sino también a una forma de vida que puede incluso llegar a cambiar una sociedad. Con más de 58 piezas de 36 creadores diferentes, entre juegos tradicionales, videojuegos muy modernos, fotografías, esculturas, videos e instalaciones, la muestra narra la historia del juego desde sus inicios y analiza el impacto de este fenómeno en la sociedad de la forma más interactiva posible, convirtiendo al espectador en un verdadero gamer. 

Producida y organizada por la Fundación "la Caixa", el director de Caixa Forum Sevilla, Moisés Roiz, junto a la jefa de Contenidos de Exposiciones de Arte de la Fundación, Carla Tarruella, acompañaban al comisario de la muestra, el director de la asociación ArsGames, Luca Carrubbal, en la presentación de la misma. Homo Ludens, Videojuegos para entender el presente, centra su reflexión sobre el papel central del juego en nuestra cultura a partir de los videojuegos, y cuenta con la ayuda del estudio Domestic Data Streamers para el diseño de la museografía y de la experiencia interactiva. 

Una muestra que estará abierta hasta el mes de octubre y que, como novedad, el centro cultural de la capital andaluza alarga su horario habitual hasta las 22 horas, retrasando a las 11 de la mañana su horario de apertura. Una medida especial que funcionará durante los meses de julio y agosto, recuperando en septiembre su horario normal. 

El contenido de la exposición incluye videojuegos y obras de arte contemporáneo de artistas como Mónica Rikić, Premio Nacional de Cultura 2021 de la Generalitat de Catalunya, Bill Viola, Daniel Canogar, Hamilton Mestizo, MatteoBittantiy Robert Yang, entre otros. En la muestra se abordan temáticas como las mecánicas universales del juego, la industria millonaria del videojuego, su influencia en otras disciplinas como el arte y la ciencia y la identidad en un mundo donde lo real convive con lo virtual, entre otras cuestiones.

Un juego para saber qué tipo de gamer eres 

Al inicio de la exposición, cada visitante recibirá un dispositivo, el Coin,un objeto con el que podrá contestar a una serie de preguntas a lo largo del recorrido. A través de las respuestas a esas preguntas, el sistema configurará un avatar para cada visitante que le identificará con un perfil de gamer: Desde el más escéptico al más devoto de los videojuegos. En la gran pantalla instalada en la última sala de la exposición, se proyecta una comunidad de avatares que representan, en tiempo real, los perfiles acumulados de todos los visitantes de la exposición.

De esta manera, la exposición aporta una nueva perspectiva en torno al concepto de jugador, que huye del estereotipo del gamer, y muestra un mundo video ludificado en el que vida y juego se funden y en el que "todos somos, lo creamos o no, jugadores", tal y como ha apuntado Luca Carrubba. 

Jugamos "desde siempre" y "sin darnos cuenta"

Al entrar en la exposición nos encontramos una serie de salas tituladas según la temática. La sala llamda "Jugamos desde siempre" expone una serie de juegos tradicionales como puzles, canicas, ajedrez o una casa de muñecas, junto a videojuegos reto como el Tetris, Street Fighter, X-Com, The Sims y Pac-Man, entre otros. 

Si continuamos el recorrido nos encontramos otros títulos como "Jugamos con dinero", donde se analiza la capacidad que ha tenido la industria del videojuego de generar un público masivo y un modelo económico estable. "Jugamos creando", trata sobre los videojuegos como herramienta de progreso y explora su potencial como medio de creación artística, urbanística y científica. "Jugamos con la identidad" un espacio que analiza el modo en que la vida en línea nos influye a nivel individual y colectivo dentro y fuera de la pantalla y las posibilidades de crear digitalmente una versión de nosotros mismo junto a una vida y un entorno diferente al que realmente vivimos. 

Entre las distintas salas que hay, el espacio titulado "Jugamos sin darnos cuenta" evidencia que el videojuego está presente en muchos ámbitos de nuestra vida cotidiana y, por lo tanto, se podría llegar a afirmar que, de un modo u otro, todo el mundo juega. El lenguaje, la estética y las mecánicas de los videojuegos están presentes en ámbitos tradicionalmente alejados del juego. Hay aplicaciones que utilizan métodos de gamificación, o ludificación, por ejemplo. En esta sala se muestra GamingLife, un interactivo creado por Luca Carrubba y Domestic Data Streamers, y el documental GameWorlds: La videoludificación de lo real, realizado con el asesoramiento directo y la participación del sociólogo especialista en videojuegos Daniel Muriel.