A los hosteleros les llueve sobre mojado con los cortes de luz de Endesa que están soliviantando a la población por la frecuencia con que se producen. Desde Hosteleros Isleños de Acosafe (Hisafe), se denuncia el daño que hacen estas incidencia por cuando no se puede servir al público en condiciones, bien que las máquinas eléctricas están apagadas o los ordenadores, que además precisan de más tiempo para reiniciarse.
Microhondas, tostadoras, freidoras eléctricas “nos ponen más difícil todavía poder vender y dadas las circunstancias que estamos viviendo, no estamos para estos fallos”.
Han sido cortes de luz continuados que se van y vienen “y quiera que no es malo para la hostelería”, dice Alfonso García, deBodegón Andalucía, en nombre de Hisafe, aunque afortunadamente no han causado daños en los electrodomésticos, aunque sí en las ventas.
Asihtur
Por su parte, la Asociación Isleña de Hostelería y Turismo (Asihtur) asegura que estos cortes de luz cada vez más habituales no ayudan al normal funcionamiento de unos establecimientos hosteleros que siguen teniendo que afrontar numerosas restricciones horarias y de aforo derivadas de los protocolos para luchar contra la Covid-19.
“Afortunadamente, los cortes de suministro no son lo suficientemente largos como para que peligre la conservación de los alimentos o se rompa la cadena de frío de los mismos, pero sí conlleva que los establecimientos afectados interrumpan forzosamente unos tramos de servicios que se hacen especialmente valiosos en circunstancias tan adversas. Cada consumición que se deja sin poner se hace sentir en las cajas de muchos negocios que apenas pueden sobrevivir. Por todo ello, esperamos que se tomen las medidas oportunas para evitar estos cortes”, señala el presidente de Asihtur, Antonio V. Páez.
