La Sala de Exposiciones del Centro de Congresos albergará hasta el próximo 29 de marzo la exposición que lleva por título
Fotoplástica de Esteban Doncel. Se trata de una exposición de fotografías, fotomontajes y fotocollages
Esteban Doncel (Torreperogil, 1969, Jaén) es licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Granada y ejerce la docencia como Profesor de Dibujo paralelamente a su actividad artística desde 1993. Ha participado en numerosas muestras colectivas, aunque su actividad expositiva ha sido especialmente prolífica de manera individual con más de una treintena de proyectos realizados por buena parte de la geografía nacional y autonómica (Almería, Barcelona, Granada, Jaén, Huelva, Linares, Málaga, Sevilla, Valencia, etc), así como provincial (Algeciras, Cádiz, El Puerto de Santa María, Jerez, San Fernando, Sanlúcar, etc).
El artista jiennense, afincado en tierras gaditanas desde hace diecinueve años, actualmente reside y trabaja en Jerez. En esta ocasión expone de manera emotiva en San Fernando, ciudad natal de su pareja sentimental y donde reside gran parte de su familia política. Además, esta exposición se convierte en una buena oportunidad para volver a contemplar su trabajo artístico pues ya expuso sus
Inmersiones (2008) para el público isleño en la Galería
GH40 y en la colectiva
Al otro lado (2009) celebrada en la misma galería.
Los trabajos seleccionados por el artista para esta muestra titulada
Fotoplástica se caracterizan principalmente por experimentar y redundar en el carácter plástico de la fotografía, estableciendo nexos de unión entre lo fotográfico, lo pictórico y lo escultórico. El artista explora un territorio limítrofe entre estos medios; así, sin renunciar a procedimientos ya tradicionales, les dota de un mayor enfoque experimental e innovador.
Destacar de la muestra, los trabajos en los que el autor presenta imágenes de composiciones escultóricas o ensamblajes tridimensionales a mayor tamaño que los objetos originales para experimentar con la ambigüedad de la escala de representación y potenciar una mayor sensación de monumentalidad al influir, de esta manera, en la percepción de lo que se ve. Objetos pequeños en su naturaleza intrínseca son devueltos para su contemplación bajo la distorsión de una dimensión que produce extrañeza y que potencia de manera contundente su presencia formal. Así la textura, el cromatismo y las características estructurales de cada objeto se muestran al detalle, pero produciendo un efecto irreal por lo inusual.
Esta manera en la que los objetos interactúan o inciden unos sobre otros hace imprescindible percibirlos bajo un punto de vista donde se hace necesaria la implicación activa y subjetiva del observador para establecer un orden de sugerencias o incitaciones connotativas. En ningún momento pretende realizar una combinación aleatoria de objetos, sino que subyace siempre la intención de propiciar una lectura de carácter social, conceptual o estético. Así, son frecuentes las referencias al dolor y al sufrimiento humano, a la soledad y la incomunicación del individuo en una sociedad, a veces violenta y hostil.
También pretende resaltar una visión crítica y emocional del paisaje y de lo cotidiano, donde es constante la preocupación por construir imágenes que sean referente y reflexión sobre el entorno inmediato y su problemática. Su obra resulta, en muchas ocasiones, un trabajo pegado a la tierra y a la realidad en la que se desenvuelve, a la situación geográfica particular y peculiar donde le ha tocado vivir. Así, por ejemplo, son muy recurrentes las referencias al trabajo agrícola, a su infancia y a su tierra natal a través de la representación de olivos. También al ambiente portuario y pesquero de la costa gaditana donde su propia trayectoria vital le ha situado como testigo presencial. Cuando fotografía barcas varadas y destrozadas en la orilla, podría tratarse de una imagen poética, pero el reverso de la obra habla de otras cosas,'Fot habla del duro trabajo en el mar, del esfuerzo y el sacrificio para sobrevivir día a día, de la precariedad de medios. Sus obras con peces martirizados se convierten en una llamada de atención sobre la mala y agotadora utilización de los recursos naturales y la sobreexplotación de los fondos marinos.