El Atlético tendrá que jugar a puerta cerrada

El Atlético de Madrid-PSV Eindhoven correspondiente a la fase de grupos de la Liga de Campeones se jugará finalmente a puerta cerrada, el 26 de noviembre aunque la multa económica se reduce de 150.000 a 75.000 euros, según confirmó ayer en su fallo el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS).

El Tribunal deportivo explica en su fallo que, habiendo examinado los argumentos y las pruebas presentadas por todas las partes, ha llegado a la conclusión de que el “Atlético de Madrid cometió graves violaciones en la seguridad durante el partido contra el Olympique de Marsella, lo que permitió que se produjeran los incidentes en el Vicente Calderón”.

Por su parte, el Atlético explicaba en su web que “la decisión tomada por el TAS se debe a la falta de coordinación que hubo con la Policía en los aspectos de seguridad que dieron lugar a los incidentes que se produjeron en el Estadio Vicente Calderón antes del comienzo del partido”.

Además, el TAS subraya que la situación se agravó por “la existencia de antecedentes recientes, por lo que se confirmó la sanción del partido a puerta cerrada del 26 de noviembre”.  De esta forma, el organismo mantiene la sanción de jugar el próximo partido de Champions a puerta cerrada, aunque decidió reducir la multa económica al no probar los presuntos actos racistas de los que le acusaban la UEFA y por lo que también queda anulado el partido de suspensión estipulado tras un período de prueba de dos años, que contempló el Comité de Apelación de la UEFA en su resolución.

La delegación española, formada por el gerente Clemente Villaverde, el asesor jurídico Juan de Dios Crespo, y los jugadores Sinama-Pongolle y Assunçao, presentó sus alegaciones a la sanción de la UEFA ante el tribunal del TAS, que estaba formado por el italiano Luigi Fumagalli, el español José Pinto Sala, que ejercía las funciones de presidente, y el suizo Olivier Carrard.

Tras conocer la sentencia, el lateral hispano argentino del Atlético, Mariano Pernía, lamentó que finalmente tengan que jugar el partido a puerta cerrada. “Uno no se lo puede creer. Es inconcebible jugar en nuestro campo sin nuestra afición. Será increíble porque es una de las que más anima”.

Por otro lado, confía en sentenciar el pase a octavos y no jugárselo ante el Olympique.
“No tenemos miedo al partido que nos espera en Marsella. Seguro que será uno de los más tranquilos que vivamos por el gran despliegue de seguridad que habrá”.