Más de una veintena de familias han perdido lavadoras, frigoríficos o televisores por las subidas de tensión
Otra más. La compañía suministradora de electricidad Endesa va a dejar en la estacada a más de una veintena de familias de la zona de Puerto de Palos, cuyos electrodomésticos se vieron afectados el pasado 9 de abril como consecuencia de una importante avería que, a día de hoy, se sigue intentando reparar.
Ha sido el presidente de la asociación vecinal, Manuel Gómez Piñero, el que ha confirmado a este medio la noticia. “Ha habido dos averías, una fue a finales de marzo y la otra el pasado 9 de abril. La primera de ellas afectó a una fase del transformador principal que alimenta a Puerto de Palos, y luego se fue el neutro provocando una subida de tensión de 220 a 380. Eso hizo daño a los vecinos, ya que a muchos les afectó el televisor, el congelador, los frigoríficos e incluso lámparas y los soportes del teléfono fijo”.
Goméz Piñero afirma en Radio La Isla que muchos de ellos siguen sufriendo a día de hoy todavía las consecuencias de la subida y que “los vecinos están yendo a Endesa a reclamar y les está diciendo que no es su problema. Nosotros lo que le pedimos es que nos dé una solución y que nos explique los motivos por los que dice que no es su problema. Lo que tengo muy claro es que de los vecinos no es, ya que tienen los cables soterrados por Endesa, a la que se le ha ido un cable neutro que está bajo tierra”.
De hecho, el presidente de la entidad vecinal afirma que, nueve días después de la avería, los operarios de la empresa que trabaja en las reparaciones para Endesa siguen tratando de encontrar el citado cable para proceder a su reparación.
La avería ha afectado de lleno a los bloques 4, 5 y 6 de la barriada isleña situada junto al Cementerio Municipal, en definitiva, más de una veintena de vecinos. “Esta mañana -por este jueves- una mujer mayor me ha dicho que ha tenido que meter en sal el bacalao que tenía en el congelador, ya que se le estaba echando a perder, en fin…”, dice Gómez Piñero, quien añade que “los vecinos se sienten tirados, no saben dónde reclamar. Están acudiendo al seguro de hogar y están esperando respuestas”.
Dos averías de tanta envergadura no las habían sufrido nunca en esta zona de San Fernando. La primera de ellas les dejó sin suministro cuatro horas, mientras que la del neutro se prolongó por casi siete horas.