El Consejo de Administración de HEMSA (antes ESISA) ha aprobado las bases que regirán la contratación de la empresa que ejecutará la construcción de las 81 viviendas protegidas en alquiler en una parcela situada en la Ronda del Estero. El procedimiento administrativo para contratar a la empresa constructora se prevé que termine aproximadamente en junio, por lo que se espera que las obras puedan comenzar a finales de verano.
Esta actuación, cuyo presupuesto asciende a 10.070.000 euros (IVA incluido), cuenta con dos subvenciones que suman unos 6,6 millones de euros, siendo la cantidad restante de aportación municipal. El plazo previsto de ejecución, según el proyecto de obra para estos trabajos es de 20 meses.
El concejal de Política de Vivienda, José Luis Cordero, ha destacado que esta actuación supone un importante impulso al parque público de vivienda en la ciudad, dando así respuesta a 81 familias con necesidades de una vivienda. “Son más las acciones que ya estamos trabajando desde la empresa pública, además de impulsando desarrollos inmobiliarios residenciales en la ciudad por promoción privada que incluye la construcción de vivienda pública”, ha añadido.
La construcción se distribuirá en planta baja y cuatro plantas más. Contará con nueve viviendas de un dormitorio de unos 40 metros cuadrados; 14 de dos dormitorios de 62 metros cuadrados de media, cuatro de ellas adaptadas para personas con movilidad reducida; 54 de tres dormitorios y una media de 70 metros cuadrados y, por último, cuatro viviendas de cuatro dormitorios pensadas para familias numerosas, contando estas últimas con unos 84 metros cuadrados.
Además, la promoción incluye diez trasteros y garajes con 74 plazas de aparcamiento.
Las viviendas, en régimen especial de alquiler, se adjudicarán a familias del Registro Municipal de Demandantes de Vivienda con ingresos 2,5 veces por debajo del IRPEM, si bien se ha querido ir más allá en el nivel de protección y se ha reservado el 50 por ciento de las viviendas a familias con ingresos inferiores a 1,2 veces el IPREM que, además, llevará aparejado una reducción del 30% de la renta mensual.
Por otro lado, cabe destacar la sostenibilidad del nuevo edificio, ya que contará con la más alta calificación (A) en cuanto a eficiencia energética y también reducción de emisiones de CO2.
No en vano, será el primer edificio de vivienda protegida en San Fernando que combinará placas fotovoltaicas y sistemas de aerotermia para la calefacción, la refrigeración y el agua caliente sanitaria. En cuanto a las placas fotovoltaicas, la promoción contará con una por vivienda, además de nueve adicionales para aprovechamiento comunitario.
Finalmente, el concejal responsable de Política de Vivienda ha subrayado que “con este último paso, 81 familias se verán muy pronto beneficiadas de una vivienda pública de enorme calidad, a un precio de alquiler muy asequible y con soluciones energéticas que, además de ser sostenibles medioambientalmente, permitirán también un ahorro importante en los gastos corrientes de los inquilinos”.
