Manos Unidas tiene en marcha numerosos proyectos para ayudar a las regiones más desfavorecidas del mal denominado Tercer Mundo.
El delegado diocesano de la entidad, Sebastián Fernández, ha trasladado desde Radio La Isla que el hambre en el mundo se solucionaría sólo con un tercio de la producción de alimento que va a la basura. También ha pedido a los ciudadanos un consumo responsable.