La Policía Nacional ha detenido en Granada y puesto a disposición judicial a una mujer de 31 años y nacionalidad cubana acusada de sustraer la tarjeta bancaria de un hombre mayor al que cuidaba y usarla en diferentes ocasiones durante su horario laboral para hacerse de forma fraudulenta con más de 2.500 euros.
La investigación se inició una vez que una sobrina del perjudicado realizó una denuncia tras percatarse de diversos reintegros de efectivo que se habían realizado contra la cuenta de su tío y cuyo importe superaba los 2.500 euros.
Los agentes llevaron a cabo averiguaciones en el entorno cercano a la víctima, ya que se comprobó que los reintegros se habían realizado de manera física y utilizando la tarjeta que continuaba en poder del titular, todos ellos en un cajero próximo al domicilio.
La presunta autora, que trabajaba en el domicilio para suplir las horas de descanso de otra cuidadora, tenía acceso a la tarjeta para poder sustraerla y devolverla sin que su titular se percatase, aprovechando además que se encontraba limitado de movimiento.
Los reintegros, por importes que oscilaban entre los 200 y los 800 euros, se llevaron a cabo en cuatro ocasiones, en horas y días en que esta mujer se encontraba trabajando en el domicilio del titular de la cuenta.
A la mujer le constaba un decreto de expulsión por un periodo de tres años dictado por la delegación del Gobierno de Oviedo y ya ha sido puesta a disposición judicial en Granada.
