Acceder a la estación de Renfe de Bahía Sur supone una odisea para las personas con movilidad reducida. Y más aún si se padecen, además, otras discapacidades. Es el caso de Miguelón Redondo, a quien su discapacidad le impide mover los brazos para pulsar el botón del ascensor, o pedir ayuda oralmente para que alguien lo haga. Pero si, con suerte, consigue acceder al ascensor, es muy probable que éste se quede bloqueado (se estropean constantemente) con él dentro, y sin poder volver a pulsar el botón. Hasta hace aproximadamente un año, Renfe disponía del servicio «atendo», con el que personal de la empresa atendía a las personas con discapacidad en el mismo ascensor mediante una llamada de teléfono. El servicio se ha retirado y ya sólo intervienen dentro del recinto de la estación.
Luisa Guerrero es una voluntaria que colabora con personas con discapacidad para que su día a día sea un poco menos difícil. Ella ha manifestado a Radio La Isla que hay que ponerse en la situación de estas personas y que la solución, por parte de Renfe, es tan sencilla como volver a activar el servicio.
La situación de los ascensores no afecta sólo para acceder a la estación, sino también para acceder a Bahía Sur desde Pery Junquera, puesto que la rampa de acceso tiene tal inclinación, que pocas sillas de ruedas pueden acceder por ella. Y aún peor si el pavimento está mojado.
Y mientras tanto, indica Luisa Guerrero, que ni Renfe, ni el defensor del pueblo, ni el ayuntamiento, responden a sus escritos.
