El accidente tuvo lugar a las 7.40 horas de la mañana, al retroceder un tren y chocar con otro que se encontraba en la estación de Aluche, en la avenida de los Poblados.
Unas 1.200 personas viajaban en total en los trenes en el momento del incidente, siniestro por el que Renfe ha abierto una comisión de investigación, informó la empresa.
Según varios testigos del suceso, el tren de la línea C-5 que viajaba en dirección Móstoles no realizó parada en Aluche, por lo que uno de los viajeros accionó el freno de emergencia, lo que causó su detención.
Unos momentos más tarde, dio marcha atrás y chocó con el segundo tren que se encontraba parado en la estación.
El joven que accionó el freno manifestó que lo hizo porque “tenía que ir a trabajar” y porque el conductor, durante todo el trayecto, “estaba haciendo paradas raras”.
En declaraciones a la agencia de noticias Efe, Pilar, que viajaba en el mismo vagón, aseguró que advirtió al joven que no debía frenar el tren, ya que “era demasiado tarde para bajarse”, aunque él mantiene que otros viajeros le han animado a hacerlo.
El joven contó que, parado el tren, habló por el interfono con el conductor, quien le preguntó qué quería y al que respondió que quería “ir a trabajar”.
Otro de los testigos, que viajaba en el primer vagón del mismo tren y que sufrió un golpe en la rodilla, explicó que en su vagón la gente se puso muy nerviosa, y que “algunos han tenido ataques de ansiedad”, porque ya estaban “dentro del túnel”.