El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, que ha adoptado esta decisión a instancias de la Fiscalía, ha elevado además su decisión a la sección segunda de la sala de lo penal de este tribunal para que decrete el archivo de las actuaciones.
Medio centenar de militantes de colectivos radicales venezolanos acudieron también al lugar para solidarizarse con el etarra deportado a este país en 1989, con pancartas y gritos de No a la extradición y A Venezuela se le respeta.
Los manifestantes, que eran de la Coordinadora Simón Bolívar y otros colectivos y algunos de ellos llegaron en un camión provisto de altavoces desde los que sonaban canciones revolucionarias y lemas, denunciaron “la campaña mediática” de la prensa internacional y de medios nacionales en contra de Venezuela y de Cubillas.
Entre las personas que acudieron a la puerta de la Fiscalía estaba también la esposa del etarra deportado, Goizeder Odriozola, periodista venezolana de origen vasco que trabaja en el despacho de la Vicepresidencia de este país.
Odriozola, que se negó a hacer declaraciones, permaneció junto a los militantes que se manifestaban, antes de abandonar el lugar, donde siguieron las coordinadoras hasta dar por concluido su acto tras anunciar que Cubillas les daba las gracias por su solidaridad.
LA DECLARACIÓN DE CUBILLAS
Cubillas declaró la pasada jornada como testigo ante un fiscal venezolano que indaga la causa a petición suya, según confirmaron a Efe fuentes judiciales.
Las fuentes de la Fiscalía Décima Nacional, ante la cual había sido citado, indicaron que el magistrado Richard Monasterio le tomó declaración en la sede del Ministerio Público, en el centro de Caracas.
Cubillas entró y salió de la sede de la Fiscalía sin que le vieran los periodistas allí congregados.