La Guardia Civil en colaboración con la Policía Federal de Bélgica y Policía Holandesa, en el marco de la operación Austral-Coles, ha detenido en el municipio malagueño de Marbella a dos jefes de una organización criminal que traficaba a gran escala con cocaína, utilizando para ello el empleo de contenedores de mercancía por vía marítima.
La organización compuesta por ciudadanos belgas y holandeses adquiría la droga en Brasil y posteriormente la transportaba hasta puertos de Bélgica y Holanda, mediante su ocultación entre la carga legal de contenedores de mercancía de gran tonelaje, según han informado desde el instituto armado en un comunicado.
La operación se inició en 2020, cuando la Policía Federal Belga y la Policía Holandesa abrieron una investigación conjunta sobre una organización responsable de grandes cargamentos de cocaína. Los destinatarios de la droga eran una empresa belga y dos holandesa.
Así, el primero de los envíos de 556 kilogramos, se incautó en Brasil el 13 de marzo de 2020, ocultos en carga legal de harina de soja. Después, en el Puerto de Amberes (Bélgica) el 26 de enero 2021, ocultos en carga legal de granos de café, se intervinieron 2.300 kilogramos. Y por último, otros dos cargamentos, de 586 y 409 kilos, respectivamente, se incautaron en el Puerto de Rotterdam el 10 de abril de 2020.
Fruto de las investigaciones, se llegó a identificar a dos de los organizadores de dichos envíos que podrían tener su residencia en la Costa del Sol, por lo que las policías europeas solicitaron la colaboración de la Guardia Civil para proceder a la localización de dichas personas.
Los agentes localizaron a una de ellas en una vivienda de lujo en una exclusiva urbanización de Marbella, por lo que se procedió a su detención. Posteriormente, también consiguió localizar y detener al otro cabecilla huido de las Autoridades Belgas, en otra vivienda de lujo de la localidad de Marbella.
Así, e identificados el resto de los miembros de la organización en Bélgica y Holanda, se procedió a la entrada y registro en dos domicilios de la provincia de Málaga, al mismo tiempo que las autoridades policiales de los otros países practicaban simultáneamente otros siete registros.
En total se ha detenido a nueve personas, entre las que se hallaban los dos cabecillas de la organización. Además, se ha conseguido incautar más de 3,8 toneladas de cocaína, tres vehículos de alta gama, numerosos terminales móviles con información relevante, dispositivos de memoria de interés para la investigación y abundante documentación para su análisis.