El activista malagueño Paco Vega alcanza este martes los 21 días desde que comenzó la huelga de hambre de carácter indefinido para que la Junta "cumpla con el Estatuto de Autonomía para Andalucía", que recoge en su artículo 23.2, de prestaciones sociales: "Todos tienen derecho a una renta básica que garantice una condiciones de vida digna".
Vega realiza su protesta a las puertas de la Delegación del Gobierno de la Junta en Málaga, en la Alameda Principal, desde el pasado 8 de marzo y de 10.00 a 13.00 horas en los días laborables. Así, ha explicado que el 14 de febrero remitió dos misivas a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, y a la consejera de Igualdad, María José Sánchez Rubio, instando a la Administración andaluza a que aplique una renta básica.
Así, al no recibir respuesta retomó la huelga de hambre, ha aclarado Vega, agregando que el pasado mes de noviembre realizó una primera protesta por el mismo motivo que finalizó tras 22 días ya que "el debate sobre el derecho a la renta básica está en el Parlamento andaluz y en la calle", coincidiendo con la tramitación de los presupuestos de la Administración autonómica.
En este contexto, ha sostenido que "año tras año, Andalucía sigue a la cabeza del paro en la Unión Europea, y la pobreza infantil alcanza cotas realmente preocupantes", a lo que ha esgrimido está "lejos de lo que figura en el preámbulo de nuestro Estatuto de Autonomía", donde indica que el objetivo es que sea "un instrumento jurídico que impulse el bienestar, la igualdad y la justicia social".
Para Vega, "la renta básica no es caridad, es un derecho recogido en nuestro Estatuto desde hace diez años, y es un instrumento imprescindible para dotar de libertad individual a las personas, avanzando en la igualdad de género y facilitando a las mujeres que sufren violencia una herramienta para liberarse del maltratador".