Los malagueños demuestran que tenían ganas de hacer suyo el nuevo espacio expositivo
Era de esperar y se ha cumplido: los malagueños han protagonizado largas colas para acceder al nuevo Museo de La Aduana en su primer día de apertura este martes.
Así, ha quedado patente que la apertura de la nueva pinacoteca era una deuda pendiente de casi dos décadas que ha sido saldada, como queda también demostrado que los ciudadanos de la capital, que durante años han reivindicado este espacio cultural y turístico, no iban a dejar de entregarse al mismo.
Tras la inauguración oficial protagonizada este lunes por representantes institucionales de todo ámbito y color, y sociales de la capital, a partir de ahora, son los visitantes los que le dan vida.