La situación de los agricultores malagueños es especialmente complicada este año. La ola de calor y las pérdidas que está generando convierte en imprescindibles unas ayudas económicas públicas que empiezan a quedarse cortas. Y el sector clama por la comprensión del Gobierno tanto central como autonómico.
De entrada, el número de peonadas o jornales requeridos para poder cobrar subsidios tiene que disminuir. De los 35 a los 20, tal como aprobó el Consejo de Ministros en febrero de este año. Aunque no lo ha llegado a aplicar aún. El grupo socialista tiene intención de reclamárselo al Gobierno de Mariano Rajoy, a través del Parlamento.
Ramírez y el secretario de Agricultura del Partido Socialista, Antonio Yuste, se han reunido este martes con el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, José Gámez.
Gámez ha incidido en la grave situación que atraviesa el sector.
Asimismo, Gámez, ha destacado el problema del agua y de su coste. La sequía está obligando a los agricultores a reforzar sus riegos e, igualmente, los ganaderos necesitan agua para alimentar debidamente a sus animales.
El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos ha hecho un llamamiento a la Cuenca Mediterránea para que baje los precios.