El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha pedido este viernes "diálogo" a los trabajadores y a la dirección de la empresa mixta de limpieza Limasa en torno a la negociación del nuevo convenio colectivo y, aunque no ha dado plazos, sí ha advertido de que estas cuestiones "no deben ser eternas ni prolongarse a lo largo de todo el año, ni mucho menos, debe ser un tiempo razonable, el que sea necesario, pero no enormemente largo".
"No deben ser muchos meses ni muchísimas semanas, aunque quizá sí son necesarias aún algunas semanas", ha manifestado el regidor, después de que en la reunión de este pasado jueves de la mesa negociadora --la sexta desde su constitución el pasado 8 de enero-- se evidenciara el distanciamiento entre la dirección y el comité de empresa.
De la Torre ha restado importancia a este hecho: "toda negociación tiene un proceso en el que no hay acuerdo al principio porque si lo hubiera, se terminaba en seguida". Ante esto, se ha mostrado "convencido" de que "en esa mesa se sientan personas responsables, con buena y recta intención, con sentido común, que quieren servir a la ciudad y que se esforzarán en las próximas semanas en seguir negociando y avanzando para llegar a un acuerdo".
"Debe ser así y estoy convencido de que será así", ha comentado a los periodistas. Por ello, ha insistido en que "el diálogo debe reinar en una mesa de negociación de este tipo y si hay buena voluntad de diálogo no tiene por qué tensarse la situación lo más mínimo, sino que se debe aprovechar el tiempo en un sentido práctico".
Todo ello, ha dejado claro, "sin olvidar el contexto económico en el que estamos y la seguridad y la estabilidad que tiene Limasa al contar con un cliente sólido y solvente como es el Ayuntamiento" --éste último es, además, el propietario del 49 por ciento de las acciones--. Esa situación ha de ser tenida en cuenta, en su opinión, por todas las partes.
Preguntado por las razones por las que el Consistorio se ha incorporado a las negociaciones del convenio de Limasa, el alcalde ha señalado que "no hay que verlo como ningún signo de preocupación ni de querer intervenir en el proceso, aunque lógicamente el planteamiento del Ayuntamiento está expresado en las previsiones presupuestarias --este año destina a la empresa seis millones de euros menos--".
"La presencia --ha añadido-- tiene más carácter de observador y si se pueden aportar ideas, en un término constructivo, en ese mismo proceso o a posteriori, a la dirección de la empresa o, incluso, a los trabajadores".
HUELGA
Ha rechazado que la falta de entendimiento evidenciada hasta ahora pueda acabar en la convocatoria de una huelga por parte de los trabajadores, ya que "dialogando y planteando las cosas con buena fe no tiene por qué haber ninguna situación de conflicto".
Además, De la Torre ha afirmado que "el diálogo siempre es mucho más práctico que cualquier situación de conflicto, que lo que hace es que personas ajenas a esa negociación sufran las consecuencias, es decir, la ciudad, y los propios trabajadores porque hay unas pérdidas salariales en una huelga".
De todos modos, ha apuntado que la situación actual es "diferente" al de otros momentos en los que sí se materializaron esas huelgas de limpieza por parte de la plantilla de Limasa: "estamos en un contexto de situación económica difícil en el que todo el tejido productivo, sector público y privado, ha ido teniendo una pérdida salarial para que el país sea competitivo y eso afecta a todos los sectores de la sociedad". "Ese contexto está como telón de fondo de la negociación", ha concluido.