Acusado de malos tratos habituales, incendio con peligro para la vida, amenazas, acoso, quebrantamiento continuado de medida cautelares, entre otros delitos
La Fiscalía malagueña ha solicitado 29 años de prisión para un hombre que presuntamente maltrató a su expareja así como incendió el garaje donde ella y su nueva pareja habían alquilado una plaza de garaje, lo que causó varios heridos moradores del inmueble.
El juicio está previsto que comience este lunes en la Audiencia Provincial de Málaga y en el banquillo de los acusados el procesado se sentará por malos tratos habituales, incendio con peligro para la vida, amenazas, acoso, quebrantamiento continuado de medida cautelares y delitos contra la intimidad y daños.
El acusado y la víctima mantuvieron una relación sentimental durante siete años y en noviembre de 2019 cesó definitivamente, según el escrito acusatorio, al que ha tenido acceso EFE.
La pareja estuvo conviviendo primero en la localidad malagueña de Fuengirola y luego en Benalmádena (Málaga) y durante la convivencia la maltrató supuestamente dándole patadas, puñetazos, además de romper el mobiliario.
También la insultaba y le advertía de que "estás sola, dependes de mi, sin mi no puedes hacer nada"; en ese momento la situación de ella era de una mujer inmigrante, joven, con dos hijos y en situación administrativa irregular en España, "lo que el acusado aprovechó para aislarla y controlar sus movimientos".
La mujer puso una denuncia por malos tratos y al hombre se le impuso en 2016 una orden de alejamiento, aunque entre enero y octubre de 2019 se reanudó la convivencia de la pareja por motivos económicos, según explica el fiscal en su escrito, que destaca que continuó "golpeándola e insultándola a diario", por lo que ella decidió irse del domicilio.
En ese momento el procesado presuntamente comenzó "una frenética actividad tendente a controlar todos los movimientos", se ponía en contacto con ella para insultarla así como con amigos y conocidos para localizarla.
En 2020 la mujer inició una nueva relación sentimental y, "a partir de ese momento la actividad de persecución y hostigamiento se extendió también a la nueva pareja".
En febrero de 2020 el acusado supuestamente en diferentes días pinchó las ruedas del vehículo de su exnovia, fracturó la luna de su vehículo e introdujo espuma de poliuretano en los tubos de escape, además de dañar la moto de él, entre otros incidentes, por lo que decidieron alquilar una plaza cerrada de garaje.
Pero, según el relato fiscal, el encausado fue a dicho aparcamiento y "sin importarle poner en grave peligro la vida e integridad de los moradores del lugar", roció gasolina en el coche de ella y la moto de él y les prendió fuego.
Como consecuencia del incendio, además de los dos vehículos que pretendía quemar, hubo varios heridos moradores del inmueble y daños a otros vehículos, así como en zonas comunes del edificio y en domicilios particulares.
El ministerio público considera que el acusado ha concurrido en la circunstancia agravante de parentesco y la Unidad de Valoración Integral de Violencia sobre la Mujer ha señalado que presentan indicadores psicológicos y sociales "compatibles con una situación de malos tratos habituales".
La víctima se encuentra en tratamiento farmacológico por depresión, con su origen en la situación vivida y el fiscal pide ella y la veintena de residentes del edificio afectado por el incendio sean indemnizados.