¿Porqué saltan las ballenas y delfines? Tratemos de dar respuesta a esa pregunta
Es una de las preguntas más frecuentes que se hace la gente que ha tenido la suerte de observar este comportamiento espectacular. No hay una sola respuesta, pero dependiendo del comportamiento general del grupo se puede intuir porqué saltan.
Como se ha visto en artículos anteriores algunos saltos permiten a los delfines ir más rápido, como en el caso de las orcas persiguiendo a los atunes.
Aunque los delfines están totalmente adaptados al medio marino, el aire sigue teniendo mucho menos resistencia que el agua, de esta forma, cuando saltan a gran velocidad pueden acelerar durante el salto y así acercarse a su presa poco a poco. Estos tipos de saltos se han visto en gran sincronía en los delfines listados cuando empiezan a perseguir a sus presas, son momentos impresionantes cuando de repente un grupo de cientos de individuos empiezan a saltar juntos. Este hecho lo están aprovechando los peces voladores también, estos peces cuentan con pequeñas alas que les permiten escapar por el aire a sus depredadores como los delfines comunes y listados. Sin embargo no tienen siempre el tiempo de coger el vuelo para escaparse y se transforman en comida de delfín.
Hay otros tipos de saltos que se observan de manera regular en los delfines comunes y listados, y son cuando el animal salta y golpea el agua con su espalda. De esta manera crea un sonido muy fuerte debajo del agua el cual podría servir para comunicar con el resto del grupo.
Se suelen observar mientras un grupo grande de delfines están persiguiendo a un banco de peces así que probablemente tiene un uso de coordinación entre los animales o simplemente asustar a las presas y que se agrupen de manera que a los delfines les resulte más fácil comérselos.
En caso de los cachalotes, los saltos no son muy frecuentes y en el Estrecho de Gibraltar hay que tener suerte para observarlos, porque suelen suceder en el momento que el individuo sale de su inmersión de 45 minutos.
Cuando se ve por la primera vez, no se entiende bien lo que esta pasando porque de repente sale un animal de unos 15 metros y 30 toneladas totalmente fuera del agua y la salpicadura que resulta es igual de impresionante, subiendo hasta unos 20 metros en el aire!
La mayoría de estos saltos se han observado cuando llegan al Estrecho en marzo y abril con unos cuantos parásitos en el cuerpo. En este caso se podría pensar que el salto le permite liberarse de estos parásitos.
Este año, por primera vez hemos observado saltos de rorcuales comunes. Si un salto de cachalote es impresionante, uno de rorcual común de 18 metros es increíble. Todo el mundo que iba en el barco se quedo con la boca abierta delante de el segundo animal más grande del mundo saltando totalmente fuera del agua a unos 50 metros del barco.
Los cargueros que cruzan el Estrecho son, en muchos casos, un peligro para los grandes cetáceos como los cachalotes y los rorcuales comunes. Sin embargo, los delfines de la zona los aprovechan para desplazarse de un lado al otro del Estrecho. Por ejemplo, se puede observar a los delfines mulares coger la proa de un carguero al oeste del Estrecho y dejarlo unas cuantas millas más lejos al este. El viaje habrá sido con poco gasto energético porque aprovechan la ola creada delante del bulbo o de la proa del carguero porque surfean esa ola.
En otras ocasiones, se pueden observar a los delfines surfeando y saltando en la ola creada detrás de los fast ferries que cruzan el Estrecho diariamente, o simplemente cuando hay temporales aprovechan las olas creadas por el viento. En esas ocasiones, los saltos parecen ser mucho más por divertirse que por una razón especifica. También cuando los individuos de un grupo están socializando se puede observar grandes saltos. En invierno, hemos observado los saltos más altos de delfines mulares, llegando hasta unos 6 metros!
Esto es un espectáculo que se puede disfrutar a diario en el Estrecho de Gibraltar y la Bahía de Algeciras. Hay muchas posibilidades de verlo saliendo desde Tarifa por ejemplo. Si pensáis coger vuestro propio barco, no olvidéis que hay que respetar a estos animales que viven en el mar, reduciendo la velocidad del barco a menos de 4 nudos, no acercarse a ellos a menos de 60 metros, no tratar de tocarlos, ni ir muy rápido, los cetáceos del Estrecho son muy importantes y se pueden disfrutar, pero para ello tenemos que saber como cuidarlos y conservarlos, para que nuestros hijos también los puedan disfrutar.