Los trabajadores de la factoría sanroqueña de Artenius han mostrado públicamente su temor a que la empresa pueda acabar cerrando las instalaciones. El casi centenar de empleados se encuentran inmersos, desde el pasado mes de abril, en una prórroga de seis meses de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que concluirá el próximo mes de septiembre.
La miembro de la ejecutiva provincial de FIA-UGT e integrante del comité de empresa en Artenius, Rosario González, subrayaba ayer que “no podemos decir qué va a pasar. Creo que nos están manteniendo por no tener otro competidor en el mismo sector. Eso sí, le hemos hecho un favor al estar callados porque no nos trasladan nada”.
Para la dirigente sindical, “si estuvieran trabajando en la opción de arrancar o de vender la planta, nos lo dirían. Esto parece una patada hacia delante”.
Desde UGT se indica que “siguen diciéndonos que no piensan cerrar, pero mientras estamos hipotecando nuestra prestación por desempleo por una empresa que no sabemos si nos va a responder. En septiembre ya haremos 18 meses parados”.
Por ello los empleados se muestran “muy molestos. Los trabajadores quieren respuestas y están presionando en busca de soluciones. Si la empresa está trabajando en una venta es normal que esté en secreto, pero los sindicatos deberían estar mínimamente informados”.
González resaltó que “no sabemos si quieren agotar el ERTE, pero lo que está claro es que no habrá más expedientes a partir del próximo 2 de septiembre”.
Reuniones
La integrante de la directiva provincial de FIA-UGT reveló ayer que mañana miércoles se podría producir un encuentro con la dirección de la empresa en el que la compañía dejara entrever sus perspectivas para la planta así como la situación financiera del grupo La Seda al que pertenece, tal y como se recogía en una clausula de revisión que se incluía el expediente suspensivo.
A este encuentro se sumaría el delegado provincial de Empleo, Juan Bouza, quien actuaría como mediador entre las partes y conocería además de primera mano la evolución del ERTE.
Sin embargo, la celebración de la cita se acoge con escepticismo desde las filas sindicales toda vez que para ayer lunes ya había prevista una reunión para valorar el desarrollo del expediente que fue finalmente cancelada.
González apuntó que “no sabemos por qué están a pares y nones. Para ayer había convocada una reunión, pero el pasado viernes por la tarde nos llamaron para cancelarla. Se ve que no somos una prioridad para la compañía”.
En este sentido, los trabajadores barajan que La Seda, propietaria de Artenius, estaría interesada en cerrar la fábrica sanroqueña para no crearse un competidor directo en el sector de la fabricación del PET, tras una hipotética venta a otra compañía. Según González, “nuestra quemazón es que no sabemos si van a querer un competidor. La venta tendría que realizarse bajo la fórmula de competidor-aliado, en la que hubiera negocio para las dos partes”.
A todo ello se suma que “la Junta no acaba de dar dinero en subvenciones ya que parece que la empresa no cumple las condiciones que pide Gobierno andaluz”.
Por ello, desde UGT se apunta que “aunque ellos lo niegan, tememos que nos cierren”. Eso sí, González resalta que “para cerrar tienen que tener dinero porque tiene que liquidar a la gente”.
Finalmente, el sindicato denuncia que “la compensación del paro que complementa los salarios en el ERTE la cobramos con un mes de retraso. No llegan a los dos meses para no provocar la denuncia”.
Junta
Por su parte, el subdelegado de Gobierno de la Junta de Andalucía en el Campo de Gibraltar, Rafael España, señaló ayer que el Gobierno andaluz, “ha mantenido contactos permanentes tanto con la dirección de la planta de San Roque como con La Seda, propietaria de Artenius”.
Desde la Administración andaluza se destaca que “la intención de la Junta es la de colaborar para reactivar la actividad mediante la valoración de una solicitud de incentivos”.
Con todo, España aclaró que esta solicitud está sometida a una normativa europea que vincula con su resolución. De esta forma, la petición “se está estudiando actualmente para ver si cumple con los requisitos que se exigen”.
Todo ello, según el subdelegado, “con el objetivo principal de que no se pierda ningún puesto de trabajo”.
El Prat
La situación de la planta sanroqueña difiere radicalmente de la que vive otra fábrica de similares características, también propiedad de La Seda y ubicada en El Prat de Llobregat.
Días atrás La Seda reconocía que “con el objetivo de poder adecuarse a la demanda y dar respuesta clientes”, decidió “incrementar la producción en sus instalaciones de El Prat”. Este ascenso de la operativa industrial “continuará gradualmente hasta alcanzar en junio el 100% de su capacidad instalada”.
Todo ello, debido a “la buena situación que atraviesa el mercado” que permite “comenzar la senda de la recuperación de la cuota de mercado”. Si a esto se une que La Seda también mantiene operativas plantas de PET en Turquía, Italia, Portugal y Grecia da que pensar a los trabajadores de la factoría comarcal que su futuro no es claro.
Rosario González señala que “está claro que han apostado por la planta de Barcelona, en vez de poner en marcha las dos con un 50% de producción cada una. No sabemos si nos están dejando morir. Si quisieran arrancar en septiembre, algo deberían ir haciendo. Estamos olvidados, no estamos en el mapa”.
En cualquier caso, desde la Delegación Provincial de Empleo de Cádiz se confirmó ayer que la empresa no ha tramitado ninguna solicitud de cierre.
Además, el acuerdo del ERTE incluía una cláusula por la que la empresa se compromete a “aceptar cualquier opción de viabilidad de la planta evitando cualquier camino que suponga el cierre” de la planta.