Triste comercio

Ayer, día festivo, el comercio tradicional se sumó a la apertura de las grandes superficies y en un buen número de ellos ya se pueden ver los carteles de ‘Rebajas’, que desde la liberalización de los periodos, cada año se adelantan más, a la espera de hacer caja antes de Reyes. Sin embargo, a la tristeza generalizada de la iluminación y decoración en la ciudad y el poco acierto navideño del Ayuntamiento con las atracciones típicas de estos días, se suma una dejadez, cada vez más visible, del comercio tradicional a la hora de decorar sus calles y escaparates. Hace años que es historia en esta ciudad el concurso que la Cámara de Comercio realizaba premiando a los mejores escaparates navideños, pero el interés institucional no ha sido suplido por los propios comerciantes, que, salvando honrosas excepciones, mantienen sus tiendas y sus portales como si de cualquier día del año se tratase, y eso también es hacer ciudad y política para atraer a los vecinos para que realicen sus compras. No solo las administraciones son las culpables de todo lo que sucede en esta ciudad, también nosotros, los ciudadanos y los empresarios, debemos mirar por ella, porque si no cuidamos Jaén nosotros mismos, nadie de fuera vendrá a hacerlo.