La movilización ciudadana ha conseguido este martes paralizar un desahucio en la capital, el del matrimonio formado por Luis y Diana, con tres hijos de 15, cinco y dos años de edad. La procuradora y la representación legal de la propiedad aceptaron aplazar por 20 días la orden de desahucio.
Fueron numerosos jiennenses los que con una actitud positiva y pacífica quisieron acompañar al matrimonio, que dispondrá de unos días más para intentar encontrar una solución a su situación. Y es que dan veinte días para que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos se pronuncie en relación a las medidas cautelares solicitadas por la familia; el abogado de oficio lo comunique al Juzgado de Instrucción número 1 y para que la Delegación de Vivienda de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento propongan, desde el Registro de Demandantes de Vivienda y adjudiquen, respectivamente, una vivienda pública.
La portavoz de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH), Isabel Mateos, valoró como “muy grave” que dejen en la calle a una “familia vulnerable que cumple con los requisitos del decreto antidesahucios hasta el 31 de diciembre de este año, con un recurso interpuesto, sin esperar al dictamen del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y sin vivienda alternativa alguna”.
Sólo la madre, Diana, ha encontrado empleo en el servicio de ayuda a domicilio, de momento, hasta el mes de agosto, por el que percibe algo más de 500 euros.
La concentración de ayer ante la puerta de la vivienda del matrimonio afectado estuvo apoyada por la PAH, la Fundación Proyecto don Bosco, Cáritas, las asociaciones vecinales ‘Passo’ y ‘La Unión’, a Delegación Episcopal para la Pastoral del Trabajo, la HOAC, la comunidad salesiana de San Juan Bosco, la Asociación Juvenil Centro Juvenil Domingo Savio y organizaciones y asociaciones vinculadas al espacio ‘Estrategia 128’, entre otros colectivos.