El Ministerio Fiscal pide dos años de prisión y una multa superior a los 3.800 euros --a razón de nueve euros diarios durante 14 meses-- para un vecino de Aljaraque (Huelva) por emitir música en su domicilio, con un potente equipo de sonido, en horas nocturnas causando molestias a los vecinos a los que impedía descansar, lo que generó en éstos y en sus hijas menores una situación insoportable en su vivienda. Este hombre será juzgado el próximo miércoles a las 12,00 horas en el Juzgado de lo Penal número 2.
En un escrito consultado por Europa Press, la Fiscalía también solicita la inhabilitación especial para el desempeño de cualquier profesión u oficio relacionado con la emisión de música por tiempo de dos años por un delito medioambiental por contaminación-violencia acústica y, como responsabilidad civil, una indemnización de 6.000 euros por el daño moral y las lesiones sufridas.
Los hechos se remontan al año 2012 cuando estos vecinos comenzaron a sufrir "contaminación-violencia acústica" por la actuación consciente y voluntaria del acusado, residente en la vivienda colindante. Los perjudicados adquirieron su vivienda a finales del año 2010 y desde el principio tuvieron problemas de convivencia con este hombre, que se quejaba de que le molestaban cuando encendían la barbacoa en el jardín. Ante esta situación, éste comenzó a emitir música con un potente equipo de sonido y orientando los altavoces hacia su domicilio.
Por ello, los denunciantes hablaron con el acusado con el fin de solucionar el problema de forma amistosa a lo largo de los años 2011 a 2014 pero, ante la persistencia en la conducta, formularon denuncias ante el Ayuntamiento y la Policía Local, cuyos agentes pudieron comprobar que este vecino de Aljaraque tenía puesta música a un altísimo volumen y requiriéndole para bajarla hasta en siete ocasiones, sin hacerles caso.
Ante tal situación, los perjudicados encargaron a un ingeniero industrial un informe con mediciones de emisión, en el que señaló que se superaban los límites legales de la ordenanza municipal. Por ello, en diciembre de 2014 se dictó un decreto del Ayuntamiento de Aljaraque incoando contra el acusado por infracción grave por utilización de equipo de sonido sin limitador, que ha quedado suspendido por el procedimiento penal.
El fiscal considera que esta situación produjo en los denunciantes la imposibilidad de disfrutar del derecho constitucional a la intimidad domiciliaria y al descanso y además trastornos somáticos y psíquicos de diferente alcance e intensidad.
Por su parte, el Instituto de Medicina Legal (IML) indicó en sus informes que uno de estos afectados presentó cefaleas, insomnio, irritabilidad y ansiedad por los ruidos denunciados y un trastorno adaptativo mixto, relacionado causalmente con estos ruidos para la que ha seguido tratamiento con ansiolíticos para poder descansar por la noche en su domicilio y que no será necesario en cuanto cesen los ruidos.