La familia de la bebé de 16 meses natural de la Palma del Condado (Huelva) asesinada en Almería quiere que el juez levante el secreto de sumario que pesa sobre la causa "pero no a costa de la investigación".
Así lo ha indicado a Efe el abogado de la familia, Antonio Revuelta, tras conocerse ayer que el magistrado del Juzgado de Instrucción número 2 de Almería Jesús Fernández ha dictado un auto en el que rechazaba los recursos presentados por los abogados de los dos imputados contra la prórroga del secreto de sumario.
El juez argumenta la "pendencia en la práctica de pruebas de investigación" para mantener el secreto de sumario, así como la necesidad de concluir las diligencias acordadas.
Revuelta ha indicado que "el objetivo principal" de esta parte es que se levante el secreto de sumario para tener acceso a la causa y a la información que obra en ella al objeto de trabajar sobre la misma y solicitar todas las pruebas que se considere pertinente.
Sin embargo, ha precisado que esperarán y "sacrificarán ese deseo de comenzar a trabajar", si el secreto se está manteniendo porque es necesario para la investigación.
"Queremos que se levante el secreto de sumario, pero no a costa de la investigación que, entendemos, debe completarse si el juez así lo considera", ha apuntado Revuelta, quien ha indicado que esta parte no ha hecho, por tanto, ningún petición al juez en este sentido, "por el momento".
Según precisaron ayer a Efe fuentes judiciales el juez rechaza los recursos de los imputados "en aras de no perturbar la investigación y que puedan desaparecer vestigios" de lo investigado, algo que el abogado del principal acusado, Jonathan Moya, José Ramón Cantalejo, considera que produce una situación de "total y absoluta indefensión" al desconocerse las diligencias practicadas.
Los recursos se presentaron contra el auto de 21 de febrero por el que el juez prorrogó por un mes el secreto de sumario y el próximo jueves deberá de emitir otro en el que informará de una nueva prórroga o del levantamiento.
Junto a Moya, que fue detenido el pasado 27 de diciembre por estos hechos, está imputado su amigo Raúl R.F., ambos de 25 años, en prisión desde el pasado 29 de diciembre.
La madre de la pequeña, natural de La Palma del Condado (Huelva), mantenía una relación con Jonathan Moya y se había trasladado a Almería para pasar unos días, cuando se produjo el secuestro y la posterior muerte.
