Al menos 21 personas murieron ayer en dos atentados suicidas contra dos edificios de las fuerzas de seguridad en el conflictivo noroeste de Paquistán, informaron a Efe varias fuentes policiales.
Al menos 21 personas murieron ayer en dos atentados suicidas contra dos edificios de las fuerzas de seguridad en el conflictivo noroeste de Paquistán, informaron a Efe varias fuentes policiales.
El atentado más grave tuvo lugar en Peshawar, capital de la Provincia de la Frontera Noroeste (NWFP), donde trece personas murieron y sesenta sufrieron heridas después de que un suicida detonara la carga de 200 kilogramos de explosivos que transportaba en su vehículo frente a un estadio del Ejército.
La explosión se registró a las 06.45 horas locales (01.45 GMT) y supuestamente tenía como objetivo un edificio de los servicios de inteligencia paquistaníes (ISI) situado en la zona, cuya fachada quedó muy afectada.
Entre las víctimas mortales hay siete miembros de las fuerzas de seguridad, informó a Efe una fuente policial, que no precisó el rango de los mismos.
De acuerdo con su versión, el resto de los fallecidos así como la mayoría de heridos son civiles.
Los equipos de emergencia se trasladaron al lugar del atentado, en la carretera que une Peshawar con la región tribal de Khyber, para efectuar las tareas de rescate.
Según el canal Geo, que no identifica sus fuentes, las autoridades temen que haya víctimas bajo los escombros de los edificios afectados por la deflagración.
La Policía acordonó el lugar del ataque y cerró la zona al tráfico tras habilitar rutas de transporte alternativas, mientras que las autoridades ordenaron el cierre temporal de las escuelas cercanas.
En el distrito de Bannu, limítrofe con las zonas tribales de Waziristán del Norte y del Sur, ocho personas murieron y una decena resultaron heridas en otro atentado suicida con coche bomba que tenía como objetivo una comisaría de Policía de la zona de Bakakhel, precisó a Efe una fuente policial.
Mientras, el canal Express TV, que cita a fuentes policiales, informó de que las fuerzas de seguridad ya han detenido a un sospechoso cerca del lugar de los hechos.
Paquistán, y especialmente la NWFP, atraviesa desde principios de octubre una ola de violencia terrorista que ha dejado al menos 438 muertos en una veintena de atentados contra mercados, edificios de las fuerzas de seguridad o autoridades políticas y militares.