Corea del Norte cerró hoy la puerta a nuevas negociaciones sobre el desmantelamiento de su programa nuclear, en respuesta a la actitud ?hostil? de Estados Unidos.
Corea del Norte cerró hoy la puerta a nuevas negociaciones sobre el desmantelamiento de su programa nuclear, en respuesta a la actitud “hostil” de Estados Unidos.
Así lo anunció el director general del departamento de organizaciones internacionales del Ministerio de Exteriores y portavoz de la delegación norcoreana, Ri Hung-sik, en el marco de foro asiático de seguridad celebrado en la isla tailandesa de Phuket.
“Las conversaciones han terminado”, dijo Ri en conferencia de prensa.
El funcionario norcoreano calificó de "disparate" la batería de incentivos ofrecidos por Estados Unidos y sus cuatro socios en las negociaciones –China, Corea del Sur, Japón y Rusia– a cambio de poner fin a su programa nuclear, y que incluyen la normalización de las relaciones y notable asistencia económica y energética.
Los cerca de seis años de conversaciones a seis bandas con Corea del Norte colapsaron en 2008, después de que el régimen de Pyongyang decidiera dar marcha atrás a sus compromisos y retomara el programa nuclear.
“Estados Unidos tiene que abandonar su política hostil de inmediato, entonces las conversaciones serán posibles”, agregó el funcionario norcoreano pocos minutos antes de que la jefa de la diplomacia estadounidense, Hillary Clinton, compareciera ante la prensa y denunciara la “actitud provocadora” de Corea del Norte.
“Corea del Norte no tiene lugar a donde ir, no le quedan amigos que le puedan proteger de los esfuerzos de la comunidad internacional para conducirles hacia desnuclearización”, dijo Clinton.
En una acción destinada a aumentar el aislamiento del régimen de Pyongyang, Estados Unidos aprovechó el foro para instar a la Junta Militar de Birmania (Myanmar) a que cumpla con el máximo rigor la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre Corea del Norte, un país con el que los generales birmanos han estrechado la cooperación militar.
“Sabemos que Corea del Norte y Birmania han cooperado en el pasado, vamos a vigilar para no siga”, precisó la secretaria de Estado.