La empresa propietaria del avión que el pasado martes se estrelló en el océano Índico cuando volaba a las Comoras, Yemenia, entrará en la “lista negra” europea de aerolíneas que no cumplen con la seguridad a menos que haga “grandes esfuerzos” para mejorar, advirtió ayer Francia.

El secretario de Estado francés de Transportes, Dominique Bussereau, recordó que Yemenia “está bajo estricta vigilancia”, horas después de que la compañía yemenita decidiera suspender de forma indefinida sus vuelos desde Francia, donde la comunidad originaria de las Comoras le acusa de incumplir muchas reglas básicas de seguridad.

En una entrevista a la emisora de radio RTL, Bussereau previno a Yemenia que si quiere evitar entrar a la “lista negra” de las aerolíneas que no pueden operar en la Unión Europea (UE) tendrá que realizar “grandes esfuerzos” en materia de seguridad.

El anuncio de la suspensión de los vuelos de Yemenia desde Francia se hizo este jueves en el aeropuerto de Marsella, adonde se habían trasladado varios cientos de personas de la comunidad de las Comoras para denunciar las condiciones de los aviones que el grupo yemení utiliza para volar hasta su archipiélago en el Índico.

Los manifestantes no dudaron de calificar de “avión basura” el Airbus A310 que el martes se estrelló con 153 personas a bordo, de las cuales solo pudo ser rescatada con vida una niña, repatriada a Francia, de donde habían salido la mayor parte de los pasajeros.