La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha afirmado que "las fechas de la destrucción de pruebas" que podrían haberse hallado en los ordenadores que utilizaba el extesorero del PP Luis Bárcenas en la sede de Génova "son sospechosamente próximas al momento en que Bárcenas decidió que había llegado la hora de hablar".
En un comentario publicado en su perfil de la red social Facebook recogido por Europa Press, Valenciano ha dicho que, desde su punto de vista, "la forma de actuar" del PP muestra "claramente premeditación y alevosía". "Ahora hemos sabido que se hizo también con nocturnidad. Lógico, no querían testigos y esperaron a quedarse solos en la sede", ha remachado.
Además, ha indicado que Bárcenas tenía dos ordenadores que "quedaron en manos del PP" y ha añadido que "cuando vieron claro que el extesorero se proponía cantar ante el juez, supieron inmediatamente que éste querría comprobar el contenido de esos dos ordenadores". "Sencillamente, no lo podían permitir. Y se aplicaron a la tarea de hacer desaparecer todas las pruebas que pudieran contener", ha insistido.
La dirigente socialista ha explicado que "eliminar toda la información de un ordenador hasta hacer que sea completamente irrecuperable no es tarea sencilla", así como que los "hacker más expertos aseguran que no basta con borrar un archivo", sino que hay que hacer un "trabajo más concienzudo para que lo que una vez estuvo dentro del ordenador desaparezca para siempre jamás". "Un trabajo de profesionales", ha subrayado.
"No creo que ningún dirigente del PP tenga los conocimientos informáticos que se necesitan para una operación tan compleja. Pero creo mucho menos que un técnico haga una cosa así sin haber recibido órdenes precisas de quien puede dárselas", ha declarado.
OBSTRUCCIÓN A LA JUSTICIA
Valenciano ha señalado que "nunca" se podrá conocer "qué había dentro de esos ordenadores" e imagina que "algo muy grave debía ser para que alguien corriera ese riesgo". No obstante, la 'número dos' del PSOE advierte que "esta historia no ha terminado" porque "además de financiación ilegal, pagos y cobros en dinero negro y trampas en las elecciones", se trata de un "caso flagrante de obstrucción a la justicia".
"Alguien lo hizo materialmente, pero alguien ordenó que se hiciera. Y la gran pregunta es precisamente esa: ¿Quién dio la orden? El día que eso se sepa, conoceremos mejor el barrizal en el que el PP ha convertido su tratamiento de este escándalo. Y no lo duden: antes o después, se sabrá", ha zanjado.
