Sin embargo, cada una tuvo su momento de deslumbramiento. Por un lado, Salma Hayek se llevó todos los aplausos durante el día a su llegada a la Berlinale. Luciendo un precioso vestido en azul noche de manga larga y cuerpo ajustado del que salía una falda con vuelo hasta casi la altura de la rodilla, la actriz mexicana brilló con luz propia.
Medias tupidas, salones negros de plataforma y collar de perlas oscuras ponían fin a este magnífico atuendo. En cambio, por la noche, la artista no estuvo tan acertada. Para la alfombra roja, Salma optó por un traje largo de transparencia negra con bordados que dibujaban motivos florales. Esmeraldas verdes en las orejas y un mini clutch accesorizaban su look nocturno.
Justamente lo contrario que ocurrió con Carolina Bang. La actriz escogió un modelo total black para el día con pantalones de vestir y jersey de cuello cisne y manga larga, un outfit en el que lo único que llamaba la atención era el colgante dorado.
Pero, al caer la noche, la novia de Álex de la Iglesia se transformó en toda una diva de Hollywood. Con un precioso vestido largo, recto y asimétrico, de raso azul marino y con escote y puño ribeteado de pedrería, la artista fue el centro de atención de todas las miradas. La capa de gasa que sobresalía por detrás le daba, además, un sensual aire de movimiento.