“Designo a Roland Burris como el próximo senador de Estados Unidos por Illinois”, dijo Blagojevich en una rueda de prensa.
El gobernador describió a Burris como un hombre de “integridad incuestionable y de amplia experiencia”.
“No dejen que las acusaciones contra mí manchen a este hombre bueno y honesto”, pidió el gobernador.
Burris, de 71 años, fue el primer afroamericano en ser elegido para un cargo estatal en Illinois cuando, en 1979, fue designado tesorero del estado, un puesto que ocupó hasta 1991.
En la rueda de prensa, Burris, que fue fiscal general del estado de 1991 a 1995, prometió defender “la integridad” del escaño de senador, y dijo que no tiene “ninguna relación” con el caso de corrupción en el que está inmerso Blagojevich.
Burris se negó a decir si el gobernador debería dimitir o no, y destacó que un acusado es inocente hasta que se pruebe su culpabilidad.
Por su parte, Blagojevich, que está en libertad bajo fianza, declaró que la ley le obliga a designar al sucesor a Obama.
Los líderes demócratas en el Senado de Estados Unidos han afirmado que no aceptarán a cualquier persona designada por el gobernador para ocupar el escaño dejado por el presidente electo estadounidense.
Blagojevich está acusado de querer vender el escaño de Obama a cambio de cargos públicos para él mismo y su esposa.
Además, se le acusa de haber intentado extorsionar a la empresa periodística Tribune, propietaria del diario Chicago Tribune, a cambio de la autorización para vender el estadio deportivo Wrigley Field, sede de los Chicago Cubs.
Este mismo medio, junto al Chicago Sun-Times, habían adelantado varias horas antes de hacer oficial el anuncio que sería el ex fiscal afroamericano quien ocuparía el puesto como sucesor de Obama en Illinois.