Decenas de socorristas y miembros del Ejército reanudaron ayer las tareas de rescate de las personas soterradas el sábado en un alud de lodo y piedras, aunque debieron suspenderlas horas después por las lluvias, que han dejado desde el sábado un balance de 45 muertos.

La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) informó en su último informe de que una persona fue rescatada, pero 15 más permanecen soterradas bajo toneladas de lodo y rocas en el kilómetro 171 de la carretera Interamericana, a la altura de la Cumbre de Alaska, en el departamento occidental de Totonicapán.

El alud cayó sobre decenas de vecinos que colaboraban con los socorristas en el rescate de varias personas que habían quedado atrapadas en un primer derrumbe registrado horas antes.

La Conred situó en 45 la cifra parcial de fallecidos como consecuencia de los accidentes causados por las lluvias que desde el pasado jueves azotan este país centroamericano.

Además, cifró en 55 los heridos; 254 los damnificados, y en 43.000 el número de personas que se encuentran en situación de riesgo.

El jefe del Sistema de Comando de Rescates de la Conred, Carlos Rodríguez, dijo a periodistas que “debido a lo peligroso del terreno” se ha pedido a los vecinos abstenerse de colaborar con los socorristas y alejarse del área siniestrada para evitar nuevos desastres.

En las últimas 48 horas, las autoridades de Protección Civil han evacuado a 11.495 personas.