El Ayuntamiento de El Puerto de Santa María someterá a aprobación plenaria la solicitud de una subvención para la primera fase de la rehabilitación del Monasterio de La Victoria, teniendo en cuenta que la intervención y puesta en valor de este emblemático edificio es un proyecto prioritario para el municipio y que cuenta con el respaldo de los principales agentes locales, así como de la ciudadanía en general; tal y como recoge el Plan Director de la Ciudad y considerando que contribuiría a alcanzar los objetivos marcados por el Plan de Acción Local de la Agenda Urbana 2030 de El Puerto de Santa María.
La ayuda se solicitará, en caso de aprobarse en el Pleno ordinario de este mes, que se celebrará el próximo 10 de mayo, al “Programa de mejora de la competitividad y de dinamización del Patrimonio Histórico con uso turístico, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia”.
Comprometiéndose el Ayuntamiento de El Puerto a destinar el Monasterio a uso turístico que no suponga realización de una actividad económica al menos durante diez años posteriores a la resolución definitiva de la concesión de la ayuda. El presupuesto total subvencionable de la actuación asciende a 2.818.595 euros, cubriendo el 100% de la actuación (Fase 1) con un plazo de ejecución de 13 meses comenzando en noviembre del 2024 para finalizar en diciembre del 2025.
Cabe destacar que se trata de una convocatoria que se establece en régimen de concurrencia competitiva y se pueden presentar proyectos de conservación, mantenimiento, puesta en valor y rehabilitación de bienes declarados como Bien de Interés Cultural para uso turístico y cultural, mejora de accesibilidad universal o rehabilitación y aprovechamiento de espacios con tecnologías inteligentes, entre otras actuaciones.
El Monasterio de Santa María de la Victoria representa un hito fundamental tanto en la historia como en el urbanismo de El Puerto de Santa María. Su construcción, justo a extramuros del casco histórico, comenzó en 1504, siendo entregada en 1517 a los frailes mínimos de San Francisco de Paula. Orden que, con el patrocinio señorial de la Casa de Medinaceli, supuso una amplia y poderosa implantación en el territorio y un acicate para el desarrollo urbano del enclave en los primeros años del siglo XVI. Más tarde se destinó para hospicio, albergue y hospital de heridos de guerra. Estableciéndose en él un Centro Penitenciario desde los primeros años del siglo XX.
El Monasterio es un edificio declarado Bien de Interés Cultural que forma parte del paisaje urbano local, con gran arraigo social. En la actualidad alberga diversos actos culturales y oficiales, conservando su tradición e historia.
