El pasado jueves en el Club Taurino 'El Rabo', se llevó a cabo una conferencia dirigida y presentada por Sergio Pérez, en la cual el ganadero Juan A. Gavira García, hijo del recordado Antonio Gavira Martín, repasó la historia de la ganadería que su abuelo Salvador Gavira Sánchez comprara en 1956. La particularidad de esta compra fue para cumplir el sueño de su hijo Antonio y a la vez para evitar que se fuese a estudiar a Barcelona.
Esta ganadería procede de la antigua de Raso del Portillo, que a efectos históricos se consideró como la más antigua y cuyas reses gozaban del privilegio de abrir las plazas en las corridas reales. Los dos primeros propietarios fueron Toribio y Victorino Valdés, de quien la heredó don Pablo Valdés Sanz, y que después de sucesivos cambios pasó en 1910 a don Matías Sánchez Cobaleda, quien en 1921 la traspasó a don José Marzal, el cual cambió el hierro por el que actualmente utiliza y la aumentó con vacas y un semental de la viuda de Soler, de origen Ibarra, Parladé y Conde de la Corte. A estas vacas, procedentes de Soler, se les añadieron en los años 1927 y 1931 sementales de Pablo Romero y Conde de la Corte. En 1943 adquirió la ganadería don Marcelino Rodríguez y entre 1956-1958 la vendió a don Salvador Gavira Sánchez. En 1985 se refresca la sangre con 46 vacas viejas y un semental de “Toros de El Torero” propiedad de don Salvador Domecq.
Tras la muerte de Antonio Gavira en 2005, causada por un trágico accidente en la labor campera del embarque de unas vacas bravas, la ganadería pasa a sus hijos Salvador, Juan Antonio y Almoraima. Los tres hermanos siguen al frente, pero en 2015 se separan quedándose Juan Antonio y Almoraima con algo menos de la mitad del ganado, la finca matriz 'Soto de Roma' y el hierro de Marzal; mientras que el resto de los animales bravos pasaron a ser propiedad de Salvador, quien se los lleva a la otra finca familiar denominada 'Vega Blanquilla', donde ha creado su propio hierro.
Tras el repaso por la historia se entró en un interesante debate entre el ganadero y el público donde se trataron temas como la selección que lleva a cabo en los tentaderos, el estado actual de la Fiesta, los costes de una ganadería, etc. También se dio a conocer el gran proyecto que actualmente está llevando a cabo el ganadero que se trata de una visita al campo, que se celebra cada domingo, denominada “Las edades del toro”, donde a los visitantes se le montan un remolque tirado por un tractor, recorriendo los diferentes cercados de la finca, enseñándoles la vida del toro desde su nacimiento hasta los cuatro o cinco años en los que se lidian, y se le explica también la sanidad y alimentación de las reses, realizando también un viaje por el bellísimo Parque de los Alcornocales.