El delantero afronta una fase clave de su carrera. Ha alcanzado la madurez deportiva en el que tal vez es su momento más bajo desde que llegó al Real Madrid
La barrera de los 30 años, que Gareth Bale ha superado este martes durante la pretemporada del Real Madrid en Montreal, llega para el galés con un futuro incierto en el club blanco.
El delantero afronta una fase clave de su carrera. Ha alcanzado la madurez deportiva en el que tal vez es su momento más bajo desde que llegó al Real Madrid. Por lo menos, así lo demuestran los números.
Sólo hay que ver las cifras que aporta el portal 'transfermarkt', especializado en valorar a los jugadores. Y, según revelan los números, Bale tenía un valor de 80 millones de euros cuando llegó al Real Madrid en 2013 y ahora, en el último dato, de junio de este año, costaría 60 millones, su cifra más baja desde que llegó al club blanco.
Después de seis temporadas en el Real Madrid, el jugador galés ya no es indiscutible. Los tiempos de vino y rosas en los que él y Cristiano Ronaldo eran los nombres más llamativos de la plantilla, ya han pasado. Ahora, Bale no es un fijo en el equipo de Zidane.
Tal vez al "Expreso de Cardiff" le sobró la temporada pasada. Pudo haber salido del Real Madrid a la vez que Cristiano para cerrar una época. Lo habría hecho por la puerta grande, después del golazo de chilena al Liverpool en la final de la última Liga de Campeones que ganó el conjunto blanco.
Sin embargo, el adiós de Cristiano prácticamente anunciado sobre el césped del estadio Olímpico de Kiev provocó que casi todos los focos apuntaran a Bale. Por fin, iba a tener todos los galones para que el recuerdo del jugador portugués no fuera muy duro.
Pero Bale, en el curso pasado, en el que tenía que haber dado un puñetazo en la mesa para despejar todas las dudas sobre su capacidad para erigirse como el jugador franquicia del club madridista, defraudó. No fue el único, porque gran parte de la plantilla no rindió al nivel esperado.
Su bajo nivel sí fue uno de los más llamativos. En Liga, acumuló 21 titularidades en sus 29 encuentros. Marcó 8 goles. En Liga de Campeones, jugó 7 partidos, 5 de ellos desde el inicio, con 2 tantos. En Copa del Rey participó en 3 duelos y en todos salió desde el banquillo. A todos esos datos, hay que añadir un partido en la Supercopa de Europa y 2 en el Mundial de Clubes, con un triplete.
En total, disputó 2.562 minutos repartidos en 41 duelos en los que marcó 14 goles. Se perdió 10 por lesión y pasó bastante tiempo en la enfermería, como en anteriores temporadas. Bale, después de uno de sus peores años en un momento de transición para el Real Madrid, defraudó y ahora tiene la puerta de salida abierta.
Y mientras cumple años y continúa con la pretemporada en Montreal, el Tottenham, el equipo en el que se dio a conocer al mundo, felicitó a través de su cuenta oficial de Twitter al futbolista galés. Con un escueto "Happy birthday" acompañado de un vídeo de Bale con golazos en su etapa en la entidad británica, mostró cariño y respeto hacia su exjugador.
Su posible marcha al club inglés podría ser una salida interesante para Bale, que dejaría unos millones en las arcas blancas y cedería su sitio a nuevos futbolistas con más hambre, más frescos y con ganas de iniciar un proyecto en el que, de momento, el belga Eden Hazard es la principal bandera.
Y es que la barrera de los 30 años puede traer nuevos aires a Bale, que parece necesitado de nuevos retos tras varios años de altibajos en el Real Madrid. La operación salida de Florentino Pérez está en marcha y el galés podría ser uno de los primeros implicados. Su futuro es incierto.