"El Alcalde de La Línea, Sr. Franco, con sus últimas declaraciones, rotulador en mano, se instala definitivamente en la ocultación de la realidad respecto de la economía municipal. Veamos, el Sr. Franco, en su informe sobre la deuda municipal afirma que, a fecha 31 de diciembre de 2015, la ratio de la deuda era de 328,93%. Pero, siempre existe un pero, al buen hombre se le olvida que a fecha 31 de diciembre de 2015, él, llevaba gobernando 6 meses; luego, si lo buscado por él es informar y no manipular, parece lógico que debió referirse a la ratio de deuda que él se encontró y NO la de seis meses después (en seis meses pudo firmar muchos préstamos incrementando así la deuda)".
"En el informe de Intervención para los presupuestos del año 2015, la Intervención afirma que la ratio (como lo llama el Sr. Franco) del endeudamiento era de 166,13% (folio 10, último párrafo, bajo la denominación nivel de deuda viva, del informe de la Intervención Municipal Linense)".
"Por otro lado, en el Informe de la Intervención Municipal n. 299/18, para los presupuestos de 2018, al folio 14, se afirma que, como el Sr. Franco lo llama, la ratio del endeudamiento es de 308.06%.
Sr. Franco, tiene usted un problema de credibilidad, y no lo tiene con quién ejerce la oposición, que también, lo tiene usted, y serio, con su propia Intervención Municipal que, por decirlo de forma suave, parece afirmar que, durante su mandato, ha conseguido usted, prácticamente, duplicar la ratio de la deuda".
"A partir de estos datos, todo esto que usted dice de que “se miente”, de que “se debe leer más”, de que “no deben darse datos sesgados”, va a resultar verdad; pero seguro que habrá algún ignorante que se atreva a sospechar que el mentiroso es otro y no el que usted señala. Y, en lo de la ética, mejor corremos un tupido velo ¿le parece Sr. Franco?".
"Debería Sr. Franco, en la medida de lo posible, sin faltarle a nadie mientras explica, (sabemos que eso le cuesta, pero el pueblo se lo agradecerá y nosotros, los habitualmente insultados, lo celebraremos -increíble que tengamos que agradecerle que no nos insulte-) argumentar cómo una ratio de deuda de 166,13% (según la intervención municipal, que de esto, los dineros públicos sabe, nosotros no sabemos y usted sí, y parece que mucho, incluso más de lo hubiéramos imaginado nunca, según se deduce de su brillante explicación al pueblo llano) en apenas seis meses de gobierno consiguió que creciera hasta el 328,93%. Porque eso es lo que usted dice que había seis meses después de empezar usted a manejar los dineros públicos. Esto, permítame el chascarrillo, parece el milagro de la multiplicación de los panes y los peces y, siguiendo en este tono coloquial (sin ningún otro ánimo) encima, en su inmensa humildad y sapiencia, echarles la culpa a otros, suena un poco “fariseo” (sabe de quién le hablo, ¿verdad?, aquellos a los que Nuestro Señor Jesucristo, siempre Bendito y Glorioso en las Alturas, se refirió como “sepulcros encalados”, por aquello de ser blancos por fuera pero estar llenos de podredumbre)".
"Ya, de paso, si fuera cierto cuanto dice, que me temo la Intervención Municipal va a opinar que no lo es, explíquenos cómo hizo su “milagro económico” consistente en que, siempre según usted, pasemos en el 2017 de una ratio de deuda de 276,70%, a una ratio de 308,06% en 2018, según sus propios presupuestos; porque, deje que le diga, yo tenía un profesor de matemáticas, que aún vive, que el muy torpe, insistía en que 308 son más que 276 y, si mi profesor tenía razón (cosa en la que yo no entro porque he leído poco) ha conseguido usted, en un solo ejercicio, del 2017 para el 2018, un nuevo milagro, consistente en incrementar la deuda 32 puntos porcentuales y que además esto sea culpa de los anteriores, y digo que esto es un milagro porque le recuerdo, que los anteriores dejaron de gobernar hace tres años y, la verdad, esto o es milagro o es mentira, y usted, Sr. Franco, no miente ¿verdad?".
"Al final, la única verdad va a ser que sus números económicos van a ser “históricos”. Es cierto, Sr. Franco, que usted tiene un modelo de ciudad; Nerón tenía también su modelo de ciudad y la acabó quemando. En aquella ocasión les echaron la culpa a los cristianos; ahora somos nosotros, pobre oposición ignorante, los culpables de ir contra su “proyecto de ciudad”. A mí, la verdad, mientras no humee"
"Sr. Franco, esto va a ser por las “junteras” pero yo juraría que eso de que todo esto no es una trama de usted sino contra usted, se lo había oído yo antes a un tal M. Rajoy, justo antes de liarse a martillazos con los ordenadores y de que una sentencia lo tildara de no haber dicho la verdad. ¡Odiosas comparaciones!
No me queda otra que dar mi respaldo, desde la ignorancia, a los funcionarios de la Intervención Municipal, porque” se puede engañar a todo el pueblo parte del tiempo y a parte del pueblo todo el tiempo; pero no se puede engañar a todo el pueblo todo el tiempo (Abraham Lincoln, 1809-1865)".
