Tras las intensas lluvias de la pasada semana, el litoral sanroqueños de la zona de levante, desde Alcaidesa a Cala Sardina, se ha visto completamente lleno de cañas, procedentes de los ríos cercanos y depositadas allí por la marea.
Tras una visita del tte de alcalde de Obras y Servicios y Playas, José Antonio Rojas, éste anunció que el Ayuntamiento va a tener que pedir ayuda a estamentos superiores -Junta de Andalucía y Gobierno Central- para poder retirar las cañas del litoral.
Rojas estuvo acompañado en la visita por el edil de Medio Ambiente, Juan Serván, y el de Contratación, Oscar Ledesma, y técnicos municipales, que constataron el elevadísimo volumen de cañas depositadas por el mar en los 11 kilómetros de playa del litoral de levante sanroqueño.
Lo técnicos municipales aún no han podido calcular cuánto será el volumen de lo depositado por el mar, que en algunas zonas de playa alcanza los 5 metros de anchura, impidiendo llegar a la orilla por la arena.
José Antonio Rojas señaló que “tras las fuertes lluvias, nos hemos dedicado primero a las personas, ayudando en las zonas habitadas, con la limpieza de las vías y calles, caídas de muros, etc”.
“Ahora, pasada una semana, nos hemos desplazado al litoral, constatando que el volumen de desechos orgánicos, como estas cañas de las riberas de los ríos, es muy abundante, y que no podremos eliminarlos sin ayuda”.
El edil reconoció que “hemos empezado a trabajar con nuestros medios, pero vemos que es un trabajo muy arduo el recoger este volumen tan grande”.
“Vamos a intentar retirar todas estas cañas en el menor tiempo posible, pero el volumen de residuos aportados por los ríos es enorme y estamos valorando cómo podemos eliminarlo en el menor tiempo posible”, indicó el edil.
Por ello “creemos que la colaboración de estamentos superiores como la Demarcación de Costas, del Gobierno Central, o Medio Ambiente de al Junta de Andalucía es crucial para poder acometer esta limpieza lo antes posible”, finalizó Rojas.
Las intensas precipitaciones registradas en el Campo de Gibraltar, con más de 130 lítros por metro cuadrado, pero en la zona colindante en la provincia de Málaga, las precipitaciones llegaron a los 300 litros , desbordándose rios y multiplicando su caudal arroyos y riachuelos.