La selección española, impulsada por la Asociación Española de Puzzles (Aepuzz), logró la plata en el Campeonato Europeo de Puzzles, celebrado durante el pasado fin de semana en la localidad belga de Hannut. La competición, que se viene celebrando desde hace treinta años, atrae a un millar de expertos montadores de rompecabezas de toda Europa y es el torneo con más participación del mundo.
La delegación española, que ha contado con el respaldo de la firma comercial Educa-Borrás, estuvo dirigida por el vallisoletano Alfonso Álvarez-Ossorio, permaneció durante varias horas en primera posición. De hecho, tras completar once de los 17 puzzles propuestos el combinado español lideraba la tabla de clasificación.
Un puzzle inédito de 500 piezas daba el pistoletazo de salida del certamen, se trataba de una imagen de una manada de lobos no exenta de dificultad, pero que culminaron con holgura los cuatro montadores titulares del combinado español, compuesto por los actuales campeones de España, el toledano Fernando Iglesias, el soriano Ángel Heras, la algecireña Demelza Becerra y la catalana Mª Dolors Torra.
De hecho, fueron los representantes de Aepuzz los primeros en requerir al juez para tomar nota del tiempo empleado, 29 minutos, nueve menos que su máximo rival. Pero ese despegue se frenó en el siguiente rompecabezas de 1.000 piezas -un paisaje con barcos- fue el equipo español quien hizo aguas y perdió diez minutos, cediendo la primera plaza provisionalmente al equipo ruso.
El empate se deshizo en el primer “1.500”, un mapamundi antiguo aparentemente sin dificultad y donde los equipos rusos mostraron su habilidad en puzzles rápidos. Posteriormente, al afrontar un paisaje dolomita de 2.000 piezas, catalogado de alta dificultad, terreno donde el equipo español se siente más cómodo, fue realizado tras casi cuatro horas, con 37 minutos de ventaja sobre el equipo ruso, una ventaja que se fue diluyendo en los siguientes puzzles hasta llegar al rompecabezas número 12, donde los rusos volvieron a tomar la delantera y de forma definitiva a cuatro horas del final de la prueba.
Finalmente, el equipo titular ruso superó a España por 949 piezas, diferencia que no refleja la igualdad de ambos equipos, que mantuvieron el pulso hasta cumplidas las 20 horas.
El segundo equipo español finalizó en 8º posición, mejorando una plaza respecto al año pasado. Su mejor parcial fue en el cuarto puzzle de la serie, un jardín japonés de 1000 piezas, donde sólo cedieron 7 minutos superando incluso al primer equipo francés.
