El Gobierno de Gibraltar ha lamentado que se estén recrudeciendo las "acciones de presión de las autoridades españolas" en la frontera del Peñón, ya que durante el pasado febrero los conductores soportaron esperas de una hora prácticamente todos los días.
Según un comunicado del Ejecutivo gibraltareño, el 93 % de los días del pasado mes hubo esperas de una hora y la mitad de las jornadas la punta de espera fue de más de dos horas.
Las colas de entrada se han concentrado entre las 10.00 y las 13.00 horas, mientras que las de salida se han producido generalmente entre las 16.00 y las 00.00 horas, con puntas de hasta tres horas de espera.
Según el Ejecutivo gibraltareño, los peatones también están padeciendo esta situación, ya que mientras que en enero la punta de espera fue de 45 minutos y hubo 6 días con esperas, en febrero se han registrado 12 días con demoras que llegaron a la hora y media.
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, denunció esta situación el pasado miércoles en la reunión que mantuvo el Comité de Asuntos Exteriores del Parlamento británico, reunido en Gibraltar.
Picardo lamentó, indica el comunicado, que "la inspección de la Comisión Europea de la frontera efectuada el pasado septiembre ha fracasado estrepitosamente, ya que no sólo no ha solucionado el problema de las colas de vehículos, sino que desde la visita de los inspectores se han extendido los retrasos a los peatones en una frontera ahora vigilada por fuerzas de choque españolas".
