El gerente del Hospital Universitario Puerta del Mar, Sebastián Quintero, apunta estos dos pilares como fundamentales para una evolución favorable del virus
El gerente del Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz, Sebastián Quintero, vincula el futuro de la pandemia en el marco del verano a la disponibilidad de vacunas y al comportamiento social frente al coronavirus.
Sebastián Quintero ha hecho estas manifestaciones al programa de radio de EFEsalud, "El Bisturí", dentro del proyecto de este canal para 2021, en el que semanalmente habla con el hospital de una provincia española sobre cómo han vivido y viven la pandemia.
¿Cómo podemos estar en verano en relación con el virus?, pregunta EFEsalud.
"Es una pregunta para adivinos, más que para médicos o gestores -señala Quintero-. La evolución de aquí al verano va a depender de dos pilares: la disponibilidad de vacunas y el comportamiento de la sociedad".
"Necesitamos el mayor número posible de vacunas y que la sociedad, no solo siga las recomendaciones de los gobernantes, sino que cada uno de nosotros tenga claro lo que tenemos que hacer contra el virus, ya que, a veces, por un motivo u otro, no lo hacemos", resalta.
Sebastián Quintero añade: "Ojalá tengamos una cobertura vacunal suficientemente amplia para lograr el famoso efecto de protección de grupo y, además, mantengamos las precauciones de metros de distancia, uso de la mascarilla y lavado de manos".
"Con todo esto puede que el verano sea razonablemente normal", añade.
El primer paciente de covid llegó al hospital Puerta del Mar de Cádiz el 17 de marzo de 2020, unos días después del comienzo del estado de alarma.
A partir de ahí, los pacientes llegaron en cascada, pero la primera ola y la segunda tuvieron en Cádiz y sus hospitales una importancia bastante limitada, rememora el gerente.
También recuerda que empezaron a prepararse frente al nuevo virus en febrero, cuando llegaron noticias de su expansión en Italia, y propulsaron planes de contingencia y actuación.
Quintero resalta que muy pronto decidieron garantizar el doble circuito de pacientes: covid y no covid, para dar a todos la mejor atención posible y evitar contagios en los accesos de urgencias o las consultas.
"Nuestros hospitales no estaban preparados para esto y ha habido que prepararlos sobre la marcha", completa.
En el Puerta del Mar no hubo escasez de respiradores al tener la pandemia un impacto más limitado que en otros lugares; igualmente, pudieron organizar los equipos de protección evitando que no faltaran a quienes realmente los necesitaban.
En enero de 2021, con la tercera ola, prosigue el gerente, aumentaron los casos, pero "aunque fue mucho más grave por el número de pacientes, no fue como la primera, en la que nos enfrentamos a lo desconocido desde la sensación de miedo e incertidumbre".
"En este año hemos profundizado en la polivalencia, el trabajo en equipo y la complementariedad de los profesionales sanitarios: especialistas, enfermeras, técnicos auxiliares... se ha requerido la formación de todos y el esfuerzo de todos", expone.
Para nosotros, termina Quintero sobre la organización frente al virus, "no podíamos dejar de atender a otros pacientes. No podíamos dejar que se nos murieran pacientes porque no tenían covid. El objetivo era atender de forma urgente a todo aquel que lo necesitara".
No obstante, admite que se produjeron demoras y retrasos porque, a veces, más del 50 % de las camas hospitalarias estuvieron ocupadas por los pacientes con coronavirus.